Un monje tibetano se pasea por Carabanchel

  • Ante el asombro de los vecinos que estaban regando árboles al borde de un camino
  • Conversó con los carabancheleros y se interesó por su labor de reforestación
El monje tibetano posa en un camino de Carabanchel, tras él uno de los vecinos
El monje tibetano posa en un camino de Carabanchel, tras él uno de los vecinos |JUAN GARCÍA

En Carabanchel ocurren cosas asombrosas, pero nadie esperaría ver en plena canícula a un monje tibetano paseando cerca del templo más antiguo de todo Madrid. El de Santa María La Antigua.

Ocurrió la tarde de este jueves. El grupo habitual de vecinos regantes de este paraje que quieren naturalizar vio aproximarse una figura envuelta en ropajes de color granate y azafrán. Un monje tibetano que amablemente conversó con ellos e incluso se ofreció a hacerse una foto.

El monje, que hablaba perfectamente español, elogió la labor de los vecinos y se interesó por este trabajo para recuperar el viejo camino que une Carabanchel con Aluche.

"Desde luego este entorno tiene algo especial, algo espiritual", comenta a Telemadrid.es Juan García, uno de los promotores de esta reforestación urbana.

Y no miente, allí cerca está la iglesia más antigua de todo Madrid, el templo mudéjar de Santa María La Antigua. Bajo él, restos visigodos. Y bajo los visigodos uno de los mayores yacimientos arqueológicos romanos de toda la región.

El monje tibetano, cuentan, se marchó de allí se marchó de allí tal como llegó. A paso tranquilo, hacia Carabanchel. Para algunos de los presentes había llegado desde el Techo del Mundo, pero puede que su lugar de procedencia esté mucho más cerca.