La Guardia Civil ha recuperado numerosos efectos de ornamentación fúnebre dispuestos para su venta en una chatarrería de Leganés y ha imputado al responsable de la misma y a dos trabajadores de la empresa adjudicataria de la gestión del cementerio de la localidad madrileña de Alcorcón.
Se les acusa de delitos de apropiación indebida y de la receptación de imágenes, crucifijos, féretros de zinc y otros objetos funerarios, informa la Guardia Civil.
La actuación tuvo lugar el pasado día 18 cuando agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de este Cuerpo se encontraban realizando una inspección rutinaria en la chatarrería, una sociedad de reciclaje de material férreo.
Los agentes hallaron dentro de unos bidones de grandes dimensiones ocultos bajo chatarra numerosas vasijas de latón de dudoso origen.
Ante la sospecha de que pudieran haber más material se hizo un registro más minucioso de la zona en el que fueron encontrados numerosos efectos de ornamentación fúnebre como 65 kilos de figuras religiosas, uno de aros y 112 de vasijas, 70 imágenes funerarias y cinco féretros de zinc de los utilizados para el transporte de cadáveres entre comunidades autónomas.
Todo ello fue hallado en las inmediaciones y oculto entre la chatarra.
Los agentes iniciaron una investigación para determinar el origen de los efectos y hablaron con el gerente de la chatarrería para que justificara la procedencia de los mismos.
Fruto de las gestiones los agentes identificaron a dos hombres que fueron los que se apropiaron indebidamente de los objetos y los que los vendieron a la citada sociedad de reciclaje de material férreo y descubrieron que eran trabajadores de una empresa que es la adjudicataria de los servicios del cementerio de Alcorcón.
Los agentes procedieron al decomiso de los citados efectos y a la imputación de los dos trabajadores por delito de apropiación indebida y al responsable de la empresa de reciclaje por receptación.