El Papa Francisco conoce bien España y de hecho estuvo estudiando en nuestro país. Fue en concreto en el año 1970, unos meses cruciales en su formación como jesuíta. Estuvo en Alcalá de Henares, en una residencia y colegio de la Compañía, quizás la Órden más importante a nivel educativo de nuestro país por la cantidad y calidad de centros de enseñanza jesuítas.
El Provincial de España de la Compañía de Jesús, Francisco José Ruiz Pérez, ha agradecido hoy el gesto "de entrega personal" de Jorge Mario Bergoglio al haber asumido la "importante" y "decisiva" responsabilidad de liderar la Iglesia católica, un acto que ha calificado de "generoso y valiente".
En un comunicado, el Provincial de la Compañía de Jesús en España ha subrayado la importancia de que el nuevo pontífice, un jesuita, proceda de Latinoamérica.
"La Iglesia parece mirar así a la periferia, allí donde hay una sensibilidad nueva con la que el catolicismo puede inspirarse para afrontar las muchas encrucijadas del presente", ha destacado.
Ruiz Pérez ha explicado que "en todo jesuita" hay un san Ignacio de Loyola y un san Francisco Javier, dos de los cofundadores de la Compañía de Jesús.
De esta manera, ha subrayado que mientras san Ignacio inspiró a los jesuitas "una sensibilidad notable por el servicio a la Iglesia y a su edificación espiritual", san Francisco Javier "introduce a la Compañía de Jesús en el deseo de llevar a la Iglesia a zonas del mundo en donde no está presente".
"Estoy seguro de que el Papa Francisco aportará como jesuita al liderazgo de la Iglesia el potencial de la espiritualidad ignaciana", ha afirmado.
Además, se ha mostrado convencido de que el nuevo Papa incentivará a los católicos para que practiquen el Evangelio en todos los lugares en los que "hoy la Iglesia se juega la comprensión y la aceptación de su mensaje".