Los madrileños y turistas que compren a partir del lunes un billete sencillo de Metro, Metro Ligero y EMT tendrán que pagar 1,50 euros, es decir, 50 céntimos más. La subida fue aprobada por el Consejo de Administración del Consorcio de Transportes de Madrid el 29 de julio y ratificada por la Comisión de Precios del Consejo de Consumo de la Comunidad de Madrid el pasado día 3.
Con esta subida, que sólo afectará en principio al 8% de usuarios que compra este título de transporte, Madrid se convierte en la ciudad con el billete sencillo más caro de toda España, según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Sólo Barcelona, con 1,45 euros, y San Sebastián, con 1,40, se acercan al nuevo precio de Madrid, que triplicará lo que se paga en otras ciudades, en realidad de muchísimo menor tamaño, como Zamora, donde cuesta 50 céntimos, y Palencia, donde se paga 51 céntimos.
La OCU considera "desmesurada" la subida del billete sencillo en Madrid porque "desincentiva el uso del transporte público en contra de las políticas de reducción de emisiones y de contención de la contaminación", aunque ésta no ha sido la única crítica que ha recibido esta decisión.
El portavoz socialista en la Asamblea, Tomás Gómez, ha exigido al Gobierno regional "la retirada inmediata" de la subida y ha anunciado que presentará una Proposición no de Ley (PNL) y pedirá la comparecencia del consejero de Transportes. "Exigimos a la señora Aguirre, dijo Gómez, que no se produzca la subida del transporte público y que lo haga por consideración a las familias madrileñas que tienen dificultad para llegar a fin de mes, que son el 60%, que no pueden afrontar gastos imprevistos, que son el 36%, y a esas familias que no pueden salir ni siquiera una semana de vacaciones al año, que son el 39% de los hogares madrileños".
Por su parte, un portavoz de CC.OO, Manuel Fernández Albano, ha señalado que la subida afectará principalmente al casi medio millón de parados madrileños que "no tienen la rutina de ir al trabajo" y no compran habitualmente el billete de 10 viajes, porque "no saben cuándo volverán a utilizar el transporte".
Siete años sin subir el precio
A favor de la "actualización" tarifaria se ha pronunciado el viceconsejero de Transportes e Infraestructuras, Borja Carabante, que ha destacado que el 92 por ciento de los usuarios del transporte público madrileño no se verá afectado y ha asegurado que ese aumento del 50% se corresponde con el IPC de los últimos siete años, en los que no se había tocado el precio de billete sencillo. También el portavoz popular en la Asamblea de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna, que ha dicho que la incidencia real de la subida del billete sencillo de transporte es "absolutamente mínima" y ha defendido la medida como "necesaria", ya que el precio, que fue rebajado a un euro en 2004, "se había quedado desfasado
