Entre los flashes de las cámaras de fotos y ante la expectante mirada de varios grupos de personas Xing Bao (Tesoro de Estrella) ha dado su primer paseo por la pagoda de los osos panda del Zoo Aquarium de Madrid.
A las 13.20 horas se ha abierto la puerta del criadero y los visitantes que esperaban tras el cristal han podido disfrutar por primera vez del pequeño oso panda, que ya pesa 10 kilos y que ayer cumplió 5 meses.
El bebé panda y su madre, Hua Zui Ba, que lo ha cuidado desde su nacimiento, permanecerán hasta la primavera en la pagoda, protegida del tiempo y de los visitantes, y donde las condiciones son óptimas para el desarrollo de la cría.
María Delclaux, conservadora de mamíferos terrestres del Zoo Aquarium de Madrid, ha confirmado a Efe que la cría está siguiendo un desarrollo "estupendo", aunque aún faltan unos meses para que los visitantes puedan disfrutar de él en la pradera exterior.
Xing Bao tiene que seguir aprendiendo de su madre, puesto que "aún no come bambú y no trepa del todo bien", ha explicado su cuidadora. Delclaux ha destacado que los visitantes "ya tenían muchas ganas de disfrutar de la cría, puesto que durante estos meses sólo la han podido ver a través de una pantalla que mostraba su evolución en el criadero".
Precisamente los que más han disfrutado de los primeros minutos de Xing Bao han sido los niños, los grandes protagonistas de la mañana, y que minutos antes de la salida del bebé panda ya estaban esperándole frente a la pagoda.
Uno de los más emocionados ha sido Mateo, un pequeño madrileño que ha confesado que el panda es "su animal preferido", tanto que hasta duerme con dos pandas de peluche.
Mientras las cámaras disparaban sus flashes los chavales no podían contener su emoción, entre gritos de "¡qué pequeño!" o "¡qué bonito!". "Es monísimo". Así de claro lo tenía María, otra niña que ha aprovechado el día libre para acercarse al Zoo con sus padres para ver a los pandas.
David González, un asiduo al parque zoológico, ha querido también acercarse para ver el panda con sus hijos, y ha expresado los nervios de los pequeños: "Les encantan, cada vez que venimos se llevan muchas fotos", ha dicho.
El bebé panda podrá ser visitado por los madrileños en la pagoda de los pandas del Zoo los siete días de la semana hasta la primavera, cuando será trasladado a la pradera. Hasta entonces permanecerá en la pagoda junto a su madre, y separado de su padre por una mampara para garantizar su seguridad y que se desarrolle correctamente.