El Ayuntamiento de Colmenar Viejo implanta desde esta semana un método de estacionamiento “alternativo y por quincenas” en la colonia Dos Castillas de la localidad, que ha provocado quejas entre algunos vecinos, que están recogiendo firmas, y de partidos de la oposición, como Ganemos, que denuncia que no se haya preguntado previamente a los residentes afectados.
El nuevo modelo implica que cada quince días los coches podrán aparcar únicamente en una de las aceras de la calzada, es decir, a izquierda o a derecha, dejando la otra libre.
Sin embargo, no hay restricciones en cuanto a quién puede aparcar en la calle que se permita esa semana, de forma que puede hacerlo cualquier residente de la vía o de otras zonas del municipio.
El concejal de Urbanismo de Colmenar Viejo, Jorge Domínguez, ha explicado a Efe que esta medida se ha implantado previamente en otras zonas de la localidad en las que existían problemas porque “son muy estrechas”.
Esa angostura supone que cuando hay coches aparcados a ambos lados de la calle los vehículos no pueden maniobrar, “y mucho menos puede pasar una ambulancia o un coche de bomberos”.
Domínguez ha señalado que la prioridad es “que se pueda garantizar la asistencia en caso de emergencia”, y ha precisado que hace tres semanas una ambulancia no pudo acceder a atender a un vecino porque no cabía el vehículo, al haber automóviles aparcados en ambas aceras.
“Es muy importante que se quede siempre una parte del vial libre, porque las emergencias no pueden depender de que un vecino salga a mover su coche”, ha apostillado el concejal.
También ha reconocido que no se ha hecho una consulta pública previa y que hay vecinos que le han trasladado su rechazo a la medida, pero ha resaltado que “la decisión viene motivada por las quejas previas” y que hay vecinos que están a favor de la medida.
Pese a ello, Ganemos Colmenar denuncia que el Ayuntamiento haya “impuesto” este cambio de aparcamientos en la Colonia Dos Castillas, pese a ser una zona “puramente residual” en la que “no se ha escuchado a todo el vecindario afectado”.
Por ello, afirman que hay vecinos que han presentado quejas y otro grupo de residentes se han organizado y están recogiendo firmas para reclamaciones colectivas, ante lo que Ganemos solicita al Consistorio que "dé marcha atrás, consulte a todas las partes afectadas y busque la mejor solución”.