Vecinos de Carabanchel y Usera han constituido una plataforma para protestar contra las "emisiones tóxicas" del futuro Crematorio Sur, que se levantará en el PAU de Carabanchel a través de la Empresa Mixta de Servicios Funerarios, participada por el Ayuntamiento de Madrid.
El portavoz de la plataforma, Pablo Roldán, ha explicado a Europa Press que el crematorio es una actividad "potencialmente contaminante" dadas las "emisiones tóxicas" que emiten este tipo de instalaciones.
El agravante viene dado, según Roldán, por el hecho de que el Crematorio Sur estará situado junto a viviendas, un colegio, las cocheras de la EMT, el polígono industrial, la instalación deportiva Fernández Ochoa y al centro comercial Isla Azul. "Este último es el más afectado ya que las partículas podrían llegar a su sistema de refrigeración", ha expuesto.
Desde la plataforma (integrada por la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto y la de Usera, entre otras), insisten en que los crematorios son actividades "catalogadas como potencialmente contaminantes tanto por una Directiva Europea como por la legislación nacional".
"Al ser una actividad contaminante necesita unos requerimientos dada la cercanía a las viviendas que no se están cumpliendo", han aseverado desde la iniciativa vecinal. También aseguran que ya han comenzado los movimientos de tierra en el solar.
Los vecinos se han reunido ya con los concejales del PSOE responsables de los distritos de Carabanchel y Usera, Cabriel Calles y Ana de Sande, respectivamente. El edil socialista ha explicado a Europa Press que su formación respaldará a esta iniciativa ciudadana. Su primer paso será reclamar los informes pertinentes ya que temen que el informe medioambiental esté caducado ya que éste determinaba que las obras tenían que empezar dos años después de que se presentase, un plazo temporal que ha sido excedido.