La Policía Municipal de Madrid ha inmovilizado una bici-birra que llevaba a pasajeros por el centro de Madrid mientras tomaban cerveza, y en la que en el momento de ser interceptada viajaban once personas, porque no tenía ningún permiso ni homologación técnica, ha informado hoy este cuerpo.
La denominada bici-birra es un vehículo con pedales y motor, descubierto y que cuenta con una barra y varias sillas en el que los pasajeros pueden pedalear mientras se sirven cerveza de un grifo instalado en la barra.
Los clientes pagaban un precio por un recorrido por la glorieta de Atocha, Paseo del Prado, Paseo de Recoletos, Plaza de Colón, calle Goya, calle Serrano, plaza de la Cibeles, calle Alfonso XII y Paseo de la Infanta Isabel, lugares por los que la bici-birra transitaba en medio del tráfico.
Este vehículo, que la Policía Municipal había detectado recientemente, fue localizado el pasado domingo por agentes de la Unidad Especial de Tráfico en la calle de Alfonso XII con ocho pasajeros sentados de forma lateral y otras tres sentadas en la parte posterior en un banco.
El conductor explicó que alquilaba el vehículo a grupos de personas y les hacía el citado recorrido de forma habitual. Cuando los agentes le requirieron la documentación referente a la licencia de actividad, permisos municipales, seguro de responsabilidad civil y la documentación técnica del artilugio dijo que no la tenía y solicitó la presencia del propietario.
Este hombre, de nacionalidad francesa, tampoco aportó ninguna documentación válida, por lo que el vehículo fue inmovilizado y retirado a una base municipal.
La inmovilización se practicó porque los agentes constataron que el motor de la bici-birra no correspondía al de una bicicleta motorizada, como anunciaba el propietario, ya que tenía una potencia de 1,44 KW, cuando los de la bicicletas son de 0,5.
Al considerarse un vehículo y no contar con los documentos necesarios para éste se pudo inmovilizar, además de interponer denuncia por no contar con el resto de documentos necesarios para circular y ejercer una actividad turística. La Policía Municipal considera que este vehículo supone "un riesgo grave y evidente para los ocupantes en el caso de sufrir un accidente de cualquier tipo".
Una portavoz de la empresa ha asegurado en declaraciones que sí tienen contratado un seguro, aunque en ese momento no dispusieran de la documentación correspondiente, y ha avanzado que recurrirán la sanción impuesta por la homologación técnica del vehículo.