El médico anestesista Luis Montes es desde este viernes parte del callejero de Madrid por su contribución a la defensa de la Sanidad Pública con una glorieta entre las calles Antonio Machado, César Manrique y Valle de Mena, en el barrio de Valdezarza en el distrito de Moncloa-Aravaca.
Luis Montes, que fue presidente federal de la asociación Derecho a Morir Dignamente (DMD) y durante años coordinador del servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés, falleció en abril de 2018.
Este reconocimiento fue propuesto por el PSOE y fue aprobado por el Pleno de Cibeles con los votos de los socialistas y Ahora Madrid, con la abstención de Ciudadanos y el voto en contra del PP.
En el acto, han intervenido la concejala-presidenta de Moncloa-Aravaca, Montserrat Galcerán, el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero, y la viuda del médico, María Isabel Teigell.
Galcerán ha elogiado la "especial sensibilidad" de Montes con los enfermos terminales, ayudándoles en los últimos momentos de sus vidas. "Esto provocó un montaje contra él, con el único objetivo de desprestigiar la Sanidad Pública", ha censurado. Montes fue llevado a los tribunales por el Gobierno de la Comunidad de Madrid en 2005, cuando Esperanza Aguirre era la presidenta regional, tras dos denuncias anónimas que le vinculaban con 400 presuntas sedaciones terminales irregulares, causas que fueron sobreseídas en 2008 por la Audiencia Provincial de Madrid. "Manuel Lamela estaba al frente de la Consejería de Sanidad y Luis Montes fue la pieza central de su campaña para desacreditar la Sanidad Pública", ha censurado Galcerán, que ha asegurado que mucha gente es "deudora de su trabajo" y la glorieta es "la manera de mostrar un apoyo cálido a la familia y rendirle honor".
Por su parte, Barbero, que ha acudido en calidad de amigo del anestesista, ha remarcado el "derecho a poder morir con dignidad y en último término de la manera que decida cada uno". "Luis siempre mantuvo un no rotundo ante la experiencia de un sufrimiento evitable", ha apuntado el delegado.
Por último, la viuda del anestesista ha agradecido entre lágrimas a los dos partidos políticos por hacer posible el homenaje. "Quiero romper una lanza por la gente de Derecho a Morir Dignamente, porque luchan para que sigamos teniendo derechos hasta el final de nuestras vidas", ha aseverado Teigell, que ha solicitado a las administraciones locales que informen a la ciudadanía de estos derechos, porque "a la Comunidad de Madrid no le interesa hacerlo".
La asociación Derecho a Morir Dignamente defiende la despenalización de la eutanasia, el acceso universal a los cuidados paliativos, a la implantación y difusión del testamento vital; y a la autonomía del paciente.
La inauguración de la placa ha finalizado con una pieza tocada al violonchelo por una miembro de la agrupación local del PSOE.