La Guardia Civil denuncia a Cascallana por un incidente en una protesta

  • Cascallana asegura que es "totalmente falso" que insultara a un guardia civil
Enrique Cascallana
Enrique Cascallana |Telemadrid

La Guardia Civil ha presentado una denuncia ante la Delegación del Gobierno en Madrid contra el senador del PSOE Enrique Cascallana por negarse a facilitar su identificación y por insultos a la autoridad, durante un incidente este mediodía en una concentración frente al centro de salud de Humanes.

Enrique Cascallana, exalcalde de Alcorcón y actualmente senador por Madrid, es portavoz socialista en la comisión de Interior del Senado y viceportavoz en la comisión Constitucional y de Incompatibilidades de la Cámara Alta, según la información que figura en la web del Senado.

Fuentes de la Dirección General de la Guardia Civil han explicado a Efe que el incidente ha tenido lugar entre las 12:00 y las 13:00 horas durante una protesta no autorizada en la que participaban de forma pacífica entre 50 y 60 personas frente al centro de salud de la localidad madrileña de Humanes.

Dado que la concentración no contaba con la autorización por parte de la Delegación del Gobierno, por haberse solicitado fuera de plazo, un pareja de la Guardia Civil de la localidad se dirigió a algunos de los concentrados para explicarles esta circunstancia.

En concreto, según la Guardia Civil, los agentes mantenían una conversación en tono cordial con un vecino de la localidad al que conocían cuando una de las personas que se encontraban allí comenzó entonces a increpar a los agentes y a proferir insultos contra ellos, llegando a llamarles "franquistas".

Cuando los agentes pidieron que se identificara, esta persona se negó a hacerlo y abandonó el lugar, según las fuentes de la Guardia Civil, que han recordado que todos los ciudadanos tienen la obligación de identificarse cuando se lo requieren los agentes de la autoridad.

Posteriormente, según la Guardia Civil, esta persona fue identificada como el senador socialista Enrique Cascallana, quien ha sido denunciado ante la Delegación del Gobierno por negarse a facilitar su identificación e insultos a agentes de la autoridad.

CASCALLANA ASEGURA QUE ES “TOTALMENTE FALSO”

El senador socialista Enrique Cascallana se ha mostrado hoy "sorprendido" tras enterarse "por la prensa" de que la Guardia Civil le ha denunciado ante la Delegación del Gobierno por un incidente hoy en Humanes, y ha calificado de "totalmente falso" que haya insultado a ningún agente.

El senador por Madrid y exalcalde de Alcorcón participaba en uno de los 121 actos que el PSOE madrileño ha realizado hoy en varios municipios de la región en defensa de la sanidad pública.

"Es falso que no me haya identificado. El agente ha tenido directamente mi carné de senador en la mano y, por supuesto, no he llamado 'franquista' a nadie", ha dicho Cascallana antes de puntualizar que "tiene testigos" de lo ocurrido.

Según el senador, unas ochenta personas se habían concentrado de forma pacífica frente al centro de salud y, cuando se prestaban a leer un comunicado, se les acercaron dos agentes y les preguntaron si el acto tenía autorización.

En ese momento, "el secretario general del PSOE de Humanes, que se ha identificado como responsable del acto, le ha entregado su documentación personal y le ha explicado al agente que era una concentración pacífica, que no iba a haber corte de tráfico y que se iba a limitar a leer un comunicado", ha explicado Cascallana.

Según el senador, el agente les dijo que "más de tres personas no pueden estar" concentradas, ante lo que Cascallana señala que le explicó "que eso no es una legislación aplicable en este momento y que es de la época franquista".

El agente le pidió entonces su identificación, y Cascallana le preguntó "cuál era el motivo, dado que ya estaba identificado el responsable del acto".

No obstante, señala que le entregó su carné de senador, sin que el agente apuntara sus datos personales, "es más, devolvió el carné sin ningún ánimo de escribir nada".

El senador asegura que "no ha habido ningún tipo de sugerencia, orden o prohibición" por parte de los agentes, que a continuación se marcharon y "se quedaron en un coche a unos 50 metros".

Los concentrados leyeron el comunicado y el agente, "con mucha lógica, no puso ningún impedimento al desarrollo del acto", que finalizó en unos quince o veinte minutos y transcurrió "de forma pacífica y sin ningún incidente ni ningún problema de orden público", continúa el senador.

"Cuando un agente quiere poner una denuncia, se la comunica al denunciado y yo me he ido del acto sin ninguna denuncia efectuada por el agente. Me he enterado por la prensa, lo cual es un poco sorprendente", ha concluido.