Imagen de archivo del vertedero de Colmenar Viejo | Europa Press
(Actualizado

El Ayuntamiento de Colmenar Viejo dejará de abonar la tasa de vertido, el impuesto correspondiente y los pagos por emisiones de gases de efecto invernadero durante los próximos 20 años, gracias al convenio de colaboración firmado con la Mancomunidad de Residuos del Noroeste.

Se trata de un acuerdo que el alcalde y presidente de la entidad, Carlos Blázquez, ha calificado como “histórico y sin precedentes”.

El acuerdo, que ha firmado el alcalde y presidente de la Mancomunidad, Carlos Blázquez, junto al vicepresidente de la Mancomunidad, Diego Domingo García Muñoz, regula la cooperación entre ambas administraciones en la gestión de los residuos urbanos y en el funcionamiento del futuro Complejo Ambiental del Noroeste, que se ubicará en el término municipal de Colmenar Viejo.

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La medida supondrá un ahorro de unos 70 millones de euros para el Consistorio, que hasta ahora destinaba en torno a 1,5 millones anuales a la Mancomunidad en concepto de tasas de vertido, un gasto que se preveía duplicar con la incorporación de nuevas tecnologías.

Con esta exención, el Ayuntamiento quedará libre del pago de la cuota principal al aplicar una reducción del 100 %, lo que permitirá destinar los recursos a otros servicios municipales y a la reducción de la tasa de basuras.

Blázquez ha destacado que el acuerdo “hace justicia a la inmensa solidaridad del pueblo de Colmenar Viejo, que durante los últimos 40 años ha estado soportando el vertedero en su municipio”.

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El regidor ha subrayado que, aunque “nadie quiere acoger esta instalación en su término”, la firma del convenio es esencial “para asegurar que los enormes gastos económicos que trae consigo el vertido no recaigan más sobre los colmenareños”.

Compromisos del acuerdo

El convenio establece una serie de compromisos para ambas partes, como es el caso de que el Ayuntamiento de Colmenar Viejo garantizará el acceso directo y seguro al futuro complejo, desarrollará campañas de sensibilización y educación ambiental, y controlará la calidad del aire en la zona de influencia.

También asumirá funciones de vigilancia, inspección y potestad sancionadora sobre residuos, en coordinación con la Mancomunidad, y colaborará en las actuaciones urbanísticas necesarias para el correcto funcionamiento de la planta.

Por su parte, la Mancomunidad de Municipios del Noroeste se compromete a coordinar las acciones necesarias para la operatividad del complejo, así como a colaborar en los proyectos municipales relacionados con la gestión responsable de los residuos.