El Centro de Especialidades de Navalcarnero, que ha atendido 368 consultas desde su apertura, el 17 de septiembre, ofrece "asistencia sanitaria especializada y de calidad" a más de 58.000 habitantes, incluyendo los de diez municipios vecinos.
Así lo ha destacado el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, durante una visita que ha realizado a este nuevo centro sanitario del sureste madrileño, adscrito al Hospital Universitario Rey Juan Carlos de Móstoles.
El consejero ha destacado que este centro mejora la accesibilidad sanitaria de los usuarios de Navalcarnero y de otros diez municipios de su ámbito de influencia: Sevilla la Nueva, El Álamo, Villamantilla, Villanueva de Perales, Villamanta, Villa del Prado, Aldea del Fresno, Cadalso de los Vidrios, Cenicientos y Rozas de Puerto Real.
Este nuevo centro público atiende consultas "de alta resolución", en horario de mañana y tarde, de nueve de las especialidades más demandadas por la población: cardiología, neurología, aparato locomotor, dermatología, oftalmología, psiquiatría, ginecología y obstetricia, otorrinolaringología y psicología.
UN NIVEL MUY ALTO DE EQUIPAMIENTO
Según una nota de la Consejería, para definir estas especialidades, ha sido tenida en cuenta "la experiencia acumulada" desde la apertura hace más de un año del Hospital Universitario Rey Juan Carlos y las necesidades de la población de las localidades a las que presta servicio.
Fernández-Lasquetty ha dicho que el "muy alto nivel de equipamiento" del centro permite no sólo "que el paciente reciba la exploración necesaria en la propia consulta" sino también la realización de "algunas pruebas diagnosticas".
De este modo, ha resaltado el consejero, el paciente podrá salir del centro después de recibir una "atención sanitaria completa".
Según el responsable de la Sanidad madrileña, la apertura de este nuevo centro "dependiente de un hospital público con gestión externalizada", que no ha supuesto "ningún coste añadido" a su Consejería, es "una manifestación más del compromiso de la Comunidad de Madrid con la sanidad púbica".
Las instalaciones, de 300 metros cuadrados, están dotadas con equipos de última tecnología -ecocardiógrafos, audiometros, cámaras endoscópicas y fibroscopios, autoqueratómetros, neumotonómetros o dermatoscopios- que han supuesto una inversión de 1,15 millones de euros.
