Al menos 18 guerrilleros de las FARC murieron hoy en combates con la Policía colombiana en la localidad de San Miguel, cerca de la frontera con Ecuador, donde el pasado 10 de septiembre murieron ocho policías en una emboscada rebelde.
El ministro colombiano de Defensa, Rodrigo Rivera, señaló hoy a periodistas desde la base militar de Catam, en el oeste de Bogotá, que se trató de una operación coordinada por la Policía, que tuvo el apoyo del Ejército y la Fuerza Aérea, y que aún continúa.
"La operación está aún en desarrollo, su puesto de mando ha estado aquí en Bogotá, en este momento vamos a trasladarnos en compañía del (director de la Policía) general Oscar Naranjo a la zona para dirigir personalmente allí el proceso de consolidación de esta operación", dijo el funcionario.
Rivera confirmó que hasta el momento el parte que se puede dar es de 18 guerrilleros de las FARC muertos, pero aún continúa el registro de la zona y la operación está en progreso.
Los enfrentamientos ocurrieron en cercanías al río San Miguel, en el departamento de Putumayo, próximo a la frontera con Ecuador, y los guerrilleros muertos pertenecen al frente 48 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Esa facción fue la misma que, el pasado 10 de septiembre, llevó a cabo el ataque al cuartel de Policía de la frontera en el que murieron 8 agentes.
La ONU condenó el pasado lunes la utilización de cilindros (de gas) para atacar los puestos de policía en San Miguel (Putumayo), la colocación de explosivos en el cadáver de uno de los policías fallecidos y la instalación de minas antipersonales durante su retirada e indicó que eso podría constituir un "crimen de guerra".
Ese organismo internacional también aseguró que en la primera mitad del mes de septiembre se han incrementado las hostilidades por parte de la guerrilla, lo que ha causado la muerte de por lo menos 56 personas y heridas a 52, entre policías, militares y guerrilleros.