El río Magdalena, el más importante de Colombia y que atraviesa el país, se salió de cauce en un tramo de su cuenca media, lo que motivó las primeras emergencias por inundaciones, alertaron hoy en Bogotá fuentes de los organismos de socorro.
La situación más delicada se presenta en la población de Puerto Salgar, donde unas 400 familias de cuatro barrios fueron afectadas por las aguas desbordadas del río, informó a Efe el director del Socorro Nacional de la Cruz Roja Colombiana (CRC), César Urueña.
La localidad pertenece a Cundinamarca, departamento regional del que también es capital Bogotá, y está en un vasto territorio ribereño del centro, el noroeste y el norte del país sobre el que las autoridades meteorológicas mantienen la alerta máxima por el nivel que ha alcanzado el Magdalena, que supera cotas de desbordamiento.
Urueña precisó que la emergencia en Puerto Salgar se presentó esta mañana y siguió a afectaciones menores en Honda y La Dorada, localidades en los departamentos del Tolima (suroeste) y Caldas (noroeste), respectivamente, y en la misma cuenca media del río.
"Estamos en la evaluación de daños y necesidades", apuntó el director del Socorro Nacional de la CRC, y advirtió de que el Magdalena "está a su tope".
En su informe técnico diario, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam, estatal) indicó que mantiene la alerta máxima (roja) sobre los ríos Magdalena, Cauca y Bogotá, a pesar de las condiciones secas que han imperado desde el viernes en una gran parte del país, que afronta un fuerte período de lluvias.
El centro científico también tiene en alerta máxima el embalse de Prado, situado en el Tolima y cuyo volumen de agua ha alcanzado el 123,50 por ciento.
Este embalse recibe aguas del Magdalena, río que también alimenta la represa de Betania, en el departamento vecino del Huila, con unas reservas del 95,71 por ciento y sobre el que el Ideam declaró la alerta amarilla.
Ambos embalses están entre los 22 más importantes de centrales de generación eléctrica y hacen parte de un grupo de trece cuyos niveles de agua están por encima del 90 por ciento.
A pesar del límite de sus reservas, el Ideam indicó que estas represas no realizan todavía desembalses por compuertas.
El Magdalena, con una trayectoria de 1.558 kilómetros, nace en el llamado Macizo Colombiano, desemboca en el mar Caribe tras atravesar de sur a norte el país y en sus riberas están asentados unos 700 centros poblados, entre municipios y caseríos.
El país afronta desde comienzos de septiembre pasado la segunda temporada de lluvias del año, que se ha intensificado por influencia del fenómeno de La Niña y cuyas consecuencias, como deslizamientos, aludes e inundaciones, han deja al menos 141 muertos y unos 535.000 damnificados.
Cerca de 46.000 de los afectados son vecinos de conjuntos residenciales de Bosa y Kennedy, localidades del sur y el suroeste de la capital colombiana en emergencia desde el pasado martes debido a inundaciones causadas por el río Bogotá.
El río regresó a su cauce al cesar totalmente la lluvia en la ciudad desde el viernes pasado y el nivel del agua en las áreas anegadas ha descendido de manera considerable, según los informes de la CRC y la Alcaldía de Bogotá.