Al menos 9 personas murieron hoy y 167 resultaron heridas cuando un tren arrolló a un autobús en un paso a nivel cercano a la estación del barrio de Flores en Buenos Aires, según el último recuento oficial de víctimas. Fuentes policiales informaron de la muerte de otras dos personas con lo que el número de muertos asciende a 9, mientras que otras 29 de las personas que resultaron heridas permanecen hospitalizados.
Entre los heridos hay 20 "con heridas de consideración" que permanecen hospitalizadas, dijo el director del Servicio de Atención Médica de Emergencia (SAME), Alberto Crescenti, al informar sobre el recuento oficial de víctimas.
El accidente ferroviario, el más grave de las últimas décadas en Buenos Aires, ocurrió a primera hora de la mañana, cuando un tren que ingresaba a la estación de Flores, en el centro geográfico de la capital argentina, arrolló a un autobús repleto de pasajeros que al parecer pasó por alto las barreras.
El autobús quedó aplastado al ser arrastrado por el tren, que descarriló y embistió a otro que estaba parado en la estación, agregaron.
El conductor del tren siniestrado fue rescatado de la cabina con fracturas en sus piernas y "está fuera de peligro", informó el director del SAME.
"Fueron difíciles las tareas de rescate y traslado de víctimas porque el autobús quedó destrozado y varios vagones quedaron uno encima del otro", comentó.
El comisario Omar Bravo dijo que una mujer y su bebé de dos años "se salvaron de milagro" y fueron rescatados rápidamente y que entre los heridos hay personas que estaban en el andén.
El autobús "cruzó el paso nivel cuando las barreras estaban bajas, pero vamos a esperar los resultados de las pericias y las grabaciones para determinar si eso fue así", dijo el portavoz de la empresa ferroviaria Trenes de Buenos Aires (TBA), Gustavo Gago, a emisoras de radio.
"Se trataría de una actitud temeraria e imprudente del chófer del autobús", apuntó. Varios testigos aseguraron a radios y canales de televisión que el autobús cruzó el paso a nivel con las barreras bajas, mientras que otros dijeron que las barreras no funcionaban normalmente.
El accidente, ocurrido en un horario pico de uso de transporte público, paralizó el servicio del ferrocarril Sarmiento, que comunica a Buenos Aires con la periferia oeste de la capital argentina y se calcula que transporta a unos 700.000 pasajeros al mes.
El último accidente ferroviario en Argentina había ocurrido el 16 de febrero pasado, cuando el choque de dos trenes en la localidad bonaerense de San Miguel causó 4 muertos y unos 40 heridos.