Un chico de 16 años ha sido decapitado por la policía secreta del Estado Islámico por no acudir a la mezquita para las oraciones del viernes en Yarabulus, provincia de Alepo, Siria, según ha informado la Agencia de Noticias Kurda y recoge el diario israelí 'The Jerusalem Post'.
El adolescente fue detenido el pasado sábado tras ser descubierto mientras se escondía en la casa de un familiar en una zona cercana a la frontera con Turquía.
"El chico fue detenido e imputado por herejía, el delito más grave del sistema penal del Estado Islámico", ha explicado uno de los vecinos de Yarabulus, Nasar Talyabini, en declaraciones a la agencia de noticias kurda.
El acusado fue sometido a un "juicio corto que duró solo unos minutos y después se lo llevaron a la plaza de la localidad donde fue decapitado ante una gran cantidad de gente que se congregó para presenciar la ejecución", ha añadido Talyabini.
"Antes de su ejecución, un representante del Tribunal de la Sharia del Estado Islámico leyó el veredicto por un altavoz y advirtió de que si alguien más no acude a las oraciones, sufrirá el mismo destino", ha añadido Talyabini.
Este incidente se conoce el mismo día en que la Wilaya del Cáucaso, la filial del Estado Islámico en el Cáucaso, ha publicado un vídeo instando a "matar a los herejes de Rusia" en el que amenazan con atacar al presidente Vladimir Putin e implantar la 'sharia' en el país.
La grabación está titulada Comercio Rentable y en ella piden a los musulmanes rusos sumarse a su causa ya que "el Califato ya está aquí". El vídeo concluye con la ejecución de un supuesto agente de los servicios secretos rusos, tiroteado por uno de los milicianos.