El presidente Barack Obama trató de evitar bailar mientras pudo, pero al final tuvo que bailar este domingo junto a niños que celebraban el feriado indio de Diwali, o festival de las luces.
Obama permaneció sentado durante un rato, viendo cómo su esposa, Michelle, se sumaba a niñas vestidas con prendas brillantes en una danza ondulante con gráciles movimientos de las manos.
El presidente pareció resistirse cuando estudiantes de la Escuela Secundaria del Sagrado Nombre en Mumbai se le acercaron para llamarle a bailar. Al final, Obama cedió y se levantó a bailar. El mandatario norteamericano saltó un poco y movió los brazos.
La primera dama bailó con mucho más entusiasmo que su esposo, quizás porque la víspera ya se había ganado a la prensa india cuando se quitó los zapatos y bailó con un grupo de niños pobres en un barrio de Mumbai.
Posteriormente, el presidente, presentado por la primera dama, habló con los niños y respondió a varias de sus preguntas.