El presidente de EEUU, Barack Obama, decidió cancelar una reunión bilateral en septiembre con su homólogo ruso, Vladímir Putin, por el asilo concedido por Moscú a Edward Snowden y la "falta de avances" en temas esenciales para la relación entre ambos países.
El Gobierno de Obama no ocultó su malestar la semana pasada cuando se anunció el asilo temporal otorgado por Rusia a Snowden y ya dijo entonces que estaba evaluando la "utilidad" de la reunión entre el mandatario estadounidense y Putin.
"Después de una cuidadosa revisión que comenzó en julio, hemos llegado a la conclusión de que no hay suficiente progreso reciente en nuestra agenda bilateral como para celebrar la cumbre EEUU-Rusia a comienzos de septiembre", anunció hoy la Casa Blanca en un comunicado.
Esa cumbre entre Obama y Putin estaba programada para celebrarse en Moscú en los primeros días de septiembre.
En su lugar, Obama viajará a Estocolmo el 4 y 5 de septiembre, inmediatamente antes de asistir a la cumbre del G20 que tendrá lugar los días 5 y 6 en San Petersburgo (Rusia), precisó la Casa Blanca en otro comunicado.
DECEPCIÓN EN EL KLEMLIN
El Kremlin se ha mostrado decepcionado por la decisión de la Casa Blanca de anular la visita prevista en septiembre del presidente Barack Obama a Moscú debido a la concesión de asilo en Rusia a Edward Snowden y señaló que el problema relacionado con el excontratista de la CIA no lo creó Moscú.
"Estamos decepcionados con la decisión de la administración estadounidense de anular la visita que estaba prevista a Moscú del presidente Obama para principios de septiembre", dijo Yuri Ushakov, consejero del presidente ruso, Vladímir Putin, a los periodistas.
En respuesta a la que constituye la primera consecuencia directa para las relaciones ruso-estadounidenses del "caso Snowden", el asesor de Putin incidió en que el problema en torno al fugitivo no lo ha creado Moscú.
"Está claro que esta decisión (de anular la visita de Obama) está relacionada con una situación con el ex empleado de los servicios secretos de EEUU que nosotros no hemos creado", señaló Ushakov, citado por las agencias rusas.
El asesor del Kremlin insistía así en la postura mantenida por Moscú de que la concesión de asilo temporal el pasado 1 de agosto fue un acto humanitario, ya que el joven prófugo de la Justicia de EEUU llevaba atrapado casi un mes y medio en la zona de tránsito de un aeropuerto moscovita sin poder volar a ningún país por falta de documentos.