El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo hoy que el régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, ha cometido "muchos" crímenes contra la humanidad y que espera que el informe de los inspectores de Naciones Unidas confirme un ataque con armas químicas.
"Creo que el informe será un informe abrumador (acerca) de que se usaron armas químicas, aunque no lo puedo decir públicamente en este momento hasta que reciba el informe", declaró Ban tras participar en un acto público en la sede de Naciones Unidas.
Ban adelantó que los resultados de la investigación del equipo liderado por el profesor Ake Sellström estarán listos en los próximos días y aseguró que espera que confirme el uso de armas químicas en el ataque del 21 de agosto a las afueras de Damasco.
El secretario general, que no precisó si ese ataque fue responsabilidad de las autoridades sirias o de la oposición, señaló que en todo caso el régimen de Al Asad ha cometido "muchos" crímenes contra la humanidad.
El máximo responsable de Naciones Unidas añadió también que estima que en el ataque de Guta Oriental, en la periferia de la capital siria, murieron unas 1.400 personas, y confió en que los responsables sean llevados ante la justicia.
Las declaraciones de Ban tuvieron lugar mientras el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, analizan por segundo día en Ginebra la propuesta de Moscú para que Siria ponga su arsenal bajo control internacional.
Precisamente ayer el régimen sirio envió a Naciones Unidas un documento de adhesión para unirse a la Convención Internacional para la Prohibición de las Armas Químicas, uno de los pasos incluidos en la propuesta rusa.
El secretario general señaló su satisfacción por el paso dado por Damasco y se mostró confiado en que las conversaciones de Ginebra conduzcan a "un rápido acuerdo sobre una forma de proceder que sea respaldada y apoyada por la comunidad internacional".
REUNIÓN DE LA DIPLOMACIA RUSA Y DE EE UU
Los jefes de la diplomacia de Estados Unidos y de Rusia se reunieron con el mediador internacional para Siria, Lajdar Brahimi, con quien acordaron volver a entrevistarse el próximo día 28 y fijar entonces una fecha para celebrar la conferencia de paz para Siria.
El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, y el ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, negocian hoy por segundo día en Ginebra la manera de poner bajo control internacional el arsenal de armas químicas de Siria.
Antes de reanudar sus conversaciones, Lavrov y Kerry sostuvieron un encuentro de hora y media con Brahimi para hablar sobre la continuación del proceso diplomático que comenzó hace quince meses para poner fin a la guerra civil en Siria, que ha causado el mayor coste humano que cualquier otro conflicto reciente.
La reunión en la que se decidirá la fecha de la conferencia de paz tendrá lugar en Nueva York, al margen de la Asamblea General de la ONU, a la que Kerry y Lavrov asistirán.
Sin embargo, el secretario de Estado adelantó que las perspectivas de esa conferencia -en la que se centran todos los esfuerzos de Brahimi y que es vista como la única alternativa para alcanzar una salida negociada del conflicto- dependerán de que el encuentro de hoy sobre armas químicas concluya de forma satisfactoria."
Hemos discutido sobre el trabajo que cada uno tiene que hacer" en favor de que se concrete la conferencia de paz, en la que las partes beligerantes en Siria deben negociar la constitución de un órgano de gobierno transitorio, con todos los poderes ejecutivos y en el que deberá haber representantes de ambos lados.
"Ambos estamos muy preocupados por el aumento de la espiral de destrucción en Siria. Las dos partes (beligerantes) están provocando cada vez más refugiados y más catástrofe humanitaria", lamentó Kerry.
Sin embargo, Kerry y Lavrov recordaron que la principal razón de su presencia en Ginebra es discutir sobre como retirar y destruir las armas químicas que posee el régimen sirio, sobre todo tras la petición presentada ayer mismo por el Gobierno de Bachar Al Asad de incorporarse a la Convención Internacional sobre Armas Químicas."