España incrementará próximamente su presencia en Irak después de que el Congreso de los Diputados autorizara el pasado 20 de diciembre el aumento en 150 del número de efectivos que participan en la coalición internacional liderada por EEUU que combate al yihadismo en este país.
El incremento de efectivos será de 150 (25 guardias civiles y 125 militares) y no de cien como estaba previsto inicialmente. Este despliegue tiene como objetivo ampliar los contenidos formativos del personal iraquí en la lucha contra artefactos explosivos improvisados y en desminado, en la que España es pionera al albergar el Centro de Excelencia OTAN de lucha contra estos artefactos explosivos en Hoyo de Manzanares (Madrid).
La Ley de Defensa Nacional establece que el Gobierno debe recabar la autorización del Parlamento para el envío de tropas a una misión internacional. Ese plácet fue recabado en la Comisión de Defensa del Congreso por la ministra del ramo, María Dolores de Cospedal, cuando acudió a la Cámara Baja para presentar las líneas maestras que guiarán su acción al frente del Ministerio durante esta legislatura.
Los 25 efectivos de la Guardia Civil se encargarán de instruir a las fuerzas de seguridad iraquíes, mientras que los 125 militares se encargarán del asesoramiento en materia de sanidad y de continuar con el adiestramiento táctico de unidades de las Fuerzas Armadas iraquíes y de reforzar las labores de seguridad, protección, apoyo logístico y sanitario.
La autorización que solicitó el Gobierno al Congreso de los Diputados será por un año prorrogable dependiendo de la evolución de la situación en Irak y de las decisiones que adopte España junto con sus aliados en el marco de la coalición internacional que combate al yihadismo en este país y en el seno de la OTAN.
Cospedal siempre ha defendido el "firme compromiso" que España está desempeñando en la coalición internacional contra el yihadismo en Irak. De hecho, consideró a los efectivos desplegados durante la reciente visita que hizo a ese país como la "punta de lanza de nuestros países y, en concreto, de España".
En la reunión ministerial de la coalición global contra los terroristas del autodenominado Estado Islámico (EI) celebrada el 15 de diciembre en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores británico en Londres, Cospedal destacó que el despliegue de los nuevos efectivos podría comenzar a tener lugar a principios del próximo año, efectuándose de forma modular para adaptarse a las circunstancias tan cambiantes en la región, y desplegando inicialmente en la base de Besmayah.
Un total de 370 militares españoles forman parte de la coalición internacional que combate a los yihadistas en Irak. En la base 'Gran Capitán' de Besmayah se dedican a instruir a las Fuerzas Armadas iraquíes en su combate contra los terroristas del EI.
Desde que dio comienzo la misión, las tropas españolas han adiestrado a las brigadas 92, 72, 35 mecanizada, 37 acorazada y 34 mecanizada del Ejército iraquí para que sean capaces de enfrentarse con eficacia a los elementos del citado grupo terrorista que controla amplias zonas de Irak.
España también mantiene desplegados efectivos de operaciones especiales en el aeropuerto de Bagdad y en la localidad de Taji.