El Senado de Estados Unidos aprobó hoy por abrumadora mayoría un plan de recortes de impuestos cifrado en 858.000 millones de dólares que, sin embargo, afronta una gran oposición del grupo demócrata en la Cámara de Representantes.
Con 81 votos a favor y 19 en contra, los senadores aprobaron la medida que prorroga por dos años los recortes de impuestos que vencen a finales de mes, y asimismo, los subsidios de desempleo durante 13 meses.
La medida pasa ahora a la Cámara de Representantes, donde afronta una férrea oposición de los demócratas porque incluye la extensión de los recortes tributarios para los más ricos.
Los recortes de impuestos fueron aprobados durante la presidencia de George W. Bush, y sin esa extensión hasta 2012 unos 150 millones de estadounidenses de todos los niveles salariales tendrían un aumento de impuestos a partir de enero próximo.
Además, otros dos millones de personas perderían subsidios de desempleo, en un momento en que el índice de paro aumentó al 9,8 por ciento en noviembre y cuando la recuperación económica es una de las principales prioridades de la Casa Blanca.
Horas antes del voto, el presidente de EEUU, Barack Obama, pidió la ayuda de una veintena de líderes del sector empresarial para la creación de empleos.
El mandatario convocó hoy a los principales ejecutivos de grandes empresas a una reunión en Blair House, a unos pasos de la Casa Blanca, para debatir sobre cómo espolear la creación de empleos, que considera clave para la recuperación económica.
"Espero recibir buenas ideas de ellos, pero definitivamente les hablaré sobre cómo podemos conseguir que contraten a más personas", dijo Obama antes del comienzo de la reunión.
Poco antes de esa reunión, en declaraciones a la prensa, Obama también instó al Congreso estadounidense a que apruebe el plan tributario, al reiterar que "aunque el plan de recortes de impuestos no es perfecto, ayudará al crecimiento de nuestra economía y la creación de empleos en el sector privado".
El plan de recortes de impuestos fue pactado por la Casa Blanca y los republicanos del Senado y suscitó críticas de la mayoría de los demócratas porque extiende esos recortes también a los más ricos.
El plan, que con seguridad aumentará el déficit, también prorroga un año los recortes de impuestos al Seguro Social.
Aunque el plan afronta una férrea oposición de los demócratas, los observadores preven que sea aprobado en la Cámara de Representantes.
El líder de la mayoría demócrata en la Cámara Baja, Steny Hoyer, dijo el martes que los demócratas tratarán de modificar el plan, en particular en lo que se refiere a los recortes de impuestos por concepto de patrimonio.