Chavez nacionaliza la compañía Agroisleña y expropia explotaciones agrícolas

Hugo Chávez radicaliza su revolución bolivariana. El presidente de Venezuela anunció ayer que la compañía agrícola, Agroisleña, fundada hace cinco décadas por un empresario español, ha pasado a ser propiedad del Estado. Chavez va a incrementar las expropiaciones de tierras agrícolas, que a su juicio, no están siendo utilizadas, para entregárselas a pequeños agricultores.

El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció que, este mes, su Gobierno expropiará unas 250.000 hectáreas de tierras supuestamente ociosas en tres estados del país como parte de su política de lucha contra el latifundio.

"Vamos a acelerar la revolución agraria" y para ello se va "a intervenir" terrenos en las regiones occidentales de Lara, Apure, y Zulia, afirmó Chávez durante su programa dominical de radio y televisión "Aló Presidente".

El ministro venezolano de Tierras, Juan Carlos Loyo, precisó que el total de las tierras intervenidas por el Instituto Nacional de Tierras (INTI) será de 250.000 hectáreas. "En noviembre será como el doble (...) y en 2011 ¡al galope!", añadió Chávez, quien resaltó el plan de su "revolución" socialista de desarrollar "una nueva ofensiva" en su empeño de incrementar la producción alimentaria del país.

AGROISLEÑA

Chávez también anunció la expropiación de la empresa nacional Agroisleña, dedicada a la distribución y venta de productos agroquímicos, y reiteró su decisión de nacionalizar la llamada Compañía Inglesa, de capitales británicos, que cuenta en Venezuela con nueve hatos ganaderos que suman más de 200.000 hectáreas.

Chávez insistió en que su Gobierno debe "crear definitivamente el nuevo modelo económico" socialista, y sostuvo que, para ello, es indispensable "liberar la tierra de los latifundistas" y entregarla a los campesinos para que éstos "produzcan alimentos para alimentar a la gente y no para que los conviertan en mercancía".

El mandatario venezolano declaró en 2004 la "guerra al latifundio" y la tierra ociosa en el marco de lo que denomina "revolución agraria", con la que promete ceder a los campesinos pobres lotes de terrenos para que los cultiven.

Según los datos oficiales disponibles, el Gobierno venezolano recuperó en 2009 500.000 hectáreas de tierra improductiva o de titularidad no demostrada para "garantizar su uso social" de acuerdo con el Plan Agrícola Nacional.

La oposición venezolana rechaza las expropiaciones por considerarlas ilegales y dice que el Gobierno supuestamente engaña a los campesinos porque no les entrega la titularidad de la tierra, sino un permiso para trabajarla.

También critica la política agrícola del Gobierno, que califica de destructiva, con el argumento de que la alimentación de los venezolanos depende en más de un 60 por ciento de las importaciones.

La oficialista Asamblea Nacional (AN) venezolana aprobó en junio pasado una reforma a la Ley de Tierras que introdujo la prohibición de la tercerización en los predios agrícolas y faculta al Gobierno a asumir directamente las actividades de producción y distribución de alimentos.

En la reforma, se estableció que los campesinos que demuestren ante el INTI que llevan tres años o más en situación de tercerizados tienen derecho a reclamar la adjudicación del terreno.