Buena parte de los trabajadores, así como de autónomos y empresarios españoles se sienten mal representados por las organizaciones sindicales y patronales, según un estudio de opinión sobre el mercado laboral de 2011 elaborado por InfoJobs.
En concreto, el 70,3% de los trabajadores encuestados no se considera bien representado por los sindicatos, y de ellos, un 19,2% opinan que estas organizaciones han perdido poder de negociación.
El 51,5% de los trabajadores entrevistados se muestran todavía más críticos y consideran que los sindicatos miran únicamente por sus intereses. Entre sus propios afiliados, el 48,5% dicen no sentirse bien representados por el sindicato al que pertenecen.
Aunque en menor medida que los trabajadores, una parte considerable de los autónomos y empresarios españoles tampoco confían en las asociaciones patronales.
De hecho, el 58,5% no se sienten bien representados, y de ellos el 18,8% creen que han perdido fuerza y el 45,3% que solo miran por sus intereses. Asimismo, el 33,2% de los empresarios afirman no sentirse bien representados por la patronal a la que están asociados.
En relación al papel concreto de las organizaciones sindicales y patronales en la negociación de las recientes reformas laborales, un 70,2% de trabajadores rechazan la labor de los sindicatos (un 39,2% la califican de "mala" y un 31%, "regular"), mientras que un 20,5% consideran que ha sido "buena".
Por su parte, el 49,3% de autónomos y empresarios tampoco se muestran satisfechos ante el papel de sus asociaciones (un 27,3% lo califican de "regular" y el 22%, de "malo"), frente a sólo el 18% que lo valoran como "bueno".
No obstante, pese a la desconfianza generalizada ante la labor de estas organizaciones, más de la mitad de los trabajadores (el 53,2%) todavía juzgan válido el modelo de representación sindical, frente al 45,9% que lo consideran caduco. Por el contrario, los autónomos y empresarios se muestran más críticos ya que el 56,3% de ellos creen que es necesario el cambio de modelo de representación actual.
RECHAZO GENERALIZADO A LA REFORMA DE PENSIONES.
El informe refleja también el rechazo generalizado a la reforma de las pensiones aprobada por el Gobierno por parte de diversos colectivos. La reforma de las pensiones recibe un suspenso global, aunque en un porcentaje elevado se considera que es la mejor solución en la situación actual.
El colectivo más contrario a las reformas gubernamentales es el de autónomos (el 50% cree que merma mucho sus derechos y el 15,8% está en contra aunque cree que es el mejor acuerdo), por delante de trabajadores por cuenta ajena (el 46% y el 19,3%), desempleados (el 43,1% y el 24,2%) y empresarios con menos de diez empleados a su cargo (el 41,7% y el 22,7%).
Los empresarios con más de diez empleados a su cargo son los más comprensivos con la reforma, aunque las respuestas negativas también son mayoritarias: el 28,2% la rechaza totalmente y el 26,6% está en contra, pero reconoce que es la mejor solución ante la situación económica del país.
Las reformas mejor valoradas por todos los colectivos, con valoraciones medias de 7,5 a 8,5 puntos sobre 10, son las que afectan exclusivamente a mujeres (cinco años de cotización si se interrumpe la carrera profesional para cuidar a los hijos, incremento de la pensión a viudas sin otros ingresos o cotización a la Seguridad Social de las empleadas del hogar).
Por el contrario, las reformas con peor valoración media son las relacionadas con el retraso de la edad de jubilación y la ampliación del periodo de cómputo para calcular la pensión, con un suspenso por parte de todos los colectivos.
Asimismo, el informe revela que el 76,8% de trabajadores consideran que las reformas laborales aprobadas por el Gobierno benefician a los empresarios, mientras que la opinión de los autónomos se divide principalmente entre los que creen que benefician a los empresarios (28,9%) y los que las consideran equitativas (28,9%).
Por su parte, la opinión mayoritaria entre los empresarios es que las medidas favorecen a los trabajadores (31,6%), por delante de los que las consideran equitativas (28,8%) y que favorecen a los mismos empresarios (22,7%).
Por último, el informe recoge la opinión de trabajadores, autónomos y empresarios ante el movimiento de los 'indignados'. La amplia mayoría de los entrevistados considera que este movimiento no puede influir en la toma de decisiones por parte de Gobierno, patronal y sindicatos en futuras reformas laborales. También de forma generalizada se considera que el movimiento perderá intensidad con el tiempo, aunque desempleados y autónomos son los que muestran mayor confianza en su continuidad.
