La prima de riesgo de España alcanzaba al cierre de los mercados un máximo intradía de 336 puntos básicos, su nivel más alto desde la introducción de la moneda única europea, afectada por las dudas sobre el segundo paquete de ayuda a Grecia y las dudas que suscita el sistema financiero de Italia. Así, la rentabilidad de la deuda española supera el 6% por primera vez desde 1997. El Ibex cierra la jornada con una caída del 2,69%, hasta 9.670,6 puntos
La rentabilidad de la deuda española a 10 años superó hoy el 6 % por primera vez desde 1997, frente al 5,67 % del viernes, tras dispararse por la ola de desconfianza acerca de los países periféricos europeos y que se ha avivado en las últimas jornadas por los problemas políticos y económicos de Italia.
A las 17.00 horas, el rendimiento de los títulos de deuda españoles con vencimiento en 2021 marcaba su máximo diario en el 6 %, muy por encima del 2,62 % que ofrecían sus homólogos germanos, considerados los más seguros de Europa.
La rentabilidad de la deuda soberana alemana se hundía respecto al 2,83 % del viernes, debido a que actuaba como activo refugio para los inversores.
Debido a esa distinta evolución, la prima de riesgo de España se situaba al cierre del mercado en los 336 puntos básicos.
El riesgo país del resto de países periféricos de la zona del euro, que se mide con el diferencial entre el bono nacional a diez años y el alemán, al mismo plazo, repuntaba también a esta hora, en particular el de Italia, que superaba los 287 puntos básicos.
La prima de riesgo de Grecia alcanzaba 1.433 puntos básicos en tanto que la de Portugal alcanzaba 1.067 y la de Irlanda 1.052, a la espera de la conclusión de la reunión que celebran hoy altos cargos de la Unión Europea.
La última ola de pánico que ha azotado los mercados de deuda se desató la semana pasada por los escándalos que afectan al ministro de Economía de Italia, el encargado de proponer un plan de ajuste de la economía, y el temor a que varios bancos italianos no superen las pruebas de solvencia que se publicarán el próximo viernes.
"Los inversores están mostrando que las medidas de disciplina fiscal tomadas en los diferentes países europeos no son suficientemente válidas para ellos", explicaron los analistas consultados por EFE.
La experta de Ahorro Corporación Virgina Romero señaló que le "preocupa la impaciencia de los mercados en la agenda de consolidación de las cuentas públicas", que "es algo que lleva su tiempo para que sean creíbles".
A juicio de Romero, la "irracionalidad" a la que han llegado los mercados exige la adopción de medidas más allá del ámbito europeo para que resulten convincentes.
Los países que han necesitado ayudas europeas (Grecia, Portugal e Irlanda) también sufrieron un aumento de sus primas de riesgo, que terminaron hoy en 1.388 puntos básicos, 1.027 puntos básicos y 1.025 puntos básicos, respectivamente.
Hace un año, la prima de riesgo de España rondaba los 206 puntos básicos, mientras que la de Italia estaba reducida a 138 puntos básicos.
En el caso de Irlanda, ese diferencial se situaba en 192 puntos básicos, en tanto que la de Portugal se colocaba en 202 puntos básicos y la de Grecia, que ya entonces había necesitado ayudas de la UE, rozaba los 700 puntos básicos.
FUERTE CAIDA DE LA BOLSA
Por su parte, el principal selectivo de la Bolsa española, el IBEX 35, que llegó a bajar el 3,52 % en la sesión, cerró la jornada con una caída de 267,60 puntos, equivalentes al 2,69 %, con lo que pierde todo lo ganado en lo que va de año, periodo en el que ya registra pérdidas del 1,91 %.
Tras cerrar el pasado viernes con un retroceso semanal del 5,28 % -su peor semana desde noviembre-, la Bolsa española mantuvo hoy la tendencia negativa.
En concreto, abrió con un retroceso del 1,18 % y con los inversores de nuevo muy atentos a la evolución de la deuda soberana europea y a la reunión convocada para hoy por el Eurogrupo, en la que se abordará el segundo plan de rescate a Grecia.
La ola de desconfianza acerca de los países periféricos europeos, que se incrementó por los problemas de Italia, hizo también que la prima de riesgo de este país se elevara por encima de los 300 puntos básicos, su nivel más alto desde la creación del euro.
Como consecuencia, la Bolsa de Milán registró una caída del 3,96 %, mientras que la de Fráncfort lo hizo el 2,33 %; París, el 2,71 % y Londres, el 1,03 %.
El euro cayó hoy hasta los 1,403 dólares, su menor cotización frente al dólar en casi cuatro meses.
Al igual que las bolsas europeas, Wall Street se decanta hoy por las pérdidas, y en la apertura se dejaba el 1,09 %, no solo afectado por la crisis de deuda europea también por la debilidad de los datos macroeconómicos estadounidenses.
Al otro lado del Atlántico, el presidente estadounidense, Barack Obama, también señalaba que Estados Unidos "nunca ha dejado ni dejará de pagar sus deudas", e instó a republicanos y demócratas a que acepten el precio político de un acuerdo sobre la reducción del déficit.
En España, la crisis de la deuda soberana y el contagio por la situación de la banca italiana afectó sobre todo al sector financiero.
Así, Caixabank fue el banco que más cayó, el 5,29 %, en tanto que el Banco Popular lo hizo el 4,28 %; BBVA, el 4,06 %; el Sabadell, el 3,97 %; Santander, el 3,16 % y Bankinter, el 3,08 %.
Del resto de grandes valores, Iberdrola cayó el 3,27 %; Telefónica, el 2,20 % y Repsol YPF, el 1,29 %.
No obstante, la mayor caída del IBEX 35 correspondió a Sacyr Vallehermoso, el 5,69 %, seguida de CaixaBank, Banco Popular y Endesa, que se dejaron el 4,16 %.
Ninguna empresa del IBEX 35 registró ganancias.
En el mercado continuo, Nyesa fue la que más cayó, el 9,26 %, seguida de Quabit, el 9,20 % y Metrovacesa, el 7,86 %.
En el lado de las ganancias sólo se situaron ocho empresas, aunque la que más subió hoy fue Grifols B, el 3,67 %, mientras que Rovi ganó el 1,47 %.
El efectivo negociado de la Bolsa española superó los 3.800 millones de euros.