El número de parados en España es el más bajo desde el año 2010, pero aún sigue siendo una cifra elevada. Supera las 3.800.000 personas.
Acabar con las ineficiencias del mercado laboral español para favorecer el empleo es la gran tarea del próximo gobierno y una de las prioridades de la campaña de los partidos políticos para las próximas elecciones generales del 26-J.
Las distintas fuerzas políticas han criticado al Gobierno por la precariedad del empleo, desde Pedro Sánchez hasta Pablo Iglesias. Aunque reconocen un escenario de crecimiento de la economía española creen que no se han solventado las desigualdades en el empleo y piden la derogación de la reforma electoral.
Albert Rivera quiere también reformar el mercado laboral “no con parches sino con un nuevo marco de flexibilidad”.
Por su parte, el PP pone números y habla de apertura de las reformas y de ambición, “una fórmula –dice Mariano Rajoy- que si seguimos aplicándola con la misma fe nos llevará a recuperar a 20 millones de personas con un puesto de trabajo”.
En 2015 se ha registrado la mayor caída del paro de la historia, en un año 678.000 personas han encontrado empleo y se ha bajado de la barrera de los 4.000.000.
Pero aún hay una tasa de paro elevada y una temporalidad muy alta, del 25%, por lo que somos el país de la UE con mayor número de contratos temporales.
Los expertos Mónica Meye, de Economistas frente a la crisis, Juan Ramón Rallo, Presidente del Instituto Juan de Mariana, José Carlos Díez, economista y profesor y José Ramón Pin, economista y profesor del IESE, analizan los datos y las tendencias.
EL CRECIMIENTO DEBE BENEFICIAR A LOS TRABAJADORES
Opinan que el empleo indefinido está tan protegido que es una “barrera fortísima para cualquier empresario”. Aseguran que el mercado que teníamos era muy inflexible, pero que ahora con la recuperación y el fuerte crecimiento económico que ha dado beneficios a empresas, tendrían que haberse visto beneficiados también los trabajadores y no ha sido así, por lo que habría que ir a un punto intermedio.
Creen también que tiene que haber más inversión pública y una subida del salario mínimo. En su opinión se generan más puestos de trabajo manteniendo una estabilidad jurídica, bajando los costes del trabajo y los de la Seguridad Social, y rebajando el IRP, pues con ello se genera más consumo y más puestos de trabajo.
