El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha hecho hoy en Barcelona, ante el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, un llamamiento a "evitar toda tentación de desconexión y aislamiento" para poder "competir en un mundo global".
En la clausura del congreso "Connected Hub" en el recinto de Fira de Barcelona en Montjuïc, después de compartir mesa con Puigdemont en el almuerzo de inauguración del Salón del Automóvil de Barcelona, Rajoy ha reivindicado los conceptos de "conexión y apertura" y ha recordado que "conectarse implica abrirse, suprimir barreras y compartir".
"El futuro nos exige innovación y conexión, nos impone tener la mente abierta, con espíritu emprendedor, y nos anima a entender que para competir en un mundo global y aumentar el bienestar de nuestros ciudadanos debemos evitar toda tentación de desconexión y aislamiento", ha afirmado Rajoy, antes de añadir que "sólo estar conectados abre nuevas oportunidades".
"El tema de nuestro tiempo es la conexión y la apertura", consideró el jefe del Ejecutivo, para a renglón seguido ahondar en que conectarse implica "abrirse, suprimir barreras y compartir", mientras que la Generalitat exige la celebración de un referéndum de autodeterminación en septiembre.
Además, presumió de la "marcha vigorosa" de la economía y se mostró seguro de que en 2020 habrá 20 millones de personas con un puesto de trabajo. Eso sí, precisó que esto sólo será posible si seguimos por el camino "de las políticas sensatas". "La estabilidad y la moderación son rentable para todos", indicó.
"CONEXIÓN"
El futuro, prosiguió, "nos exige innovación y conexión" y "nos impone tener la mente abierta con espíritu emprendedor". En este punto, se felicitó por el hecho de que la industria del automóvil sea "pionera" a la hora de comprender que la supresión de barreras va "en beneficio de todos".
Destacó que la propia recuperación económica es el "mejor impulso posible" para la industria del motor y remarcó la apuesta "firme" del Ejecutivo central por una área estratégica como es la innovación en el automóvil. "España es un país perfectamente identificado con el mundo del motor", aplaudió.
Reconoció que son "muchos" los desafíos que España tiene por delante. "Pero no nos debe faltar ambición, somos un gran país", comentó Rajoy, haciendo alusión al número de turistas, al gran patrimonio natural y cultural, así como al liderazgo de las empresas nacionales "en los sectores del mañana".
Pero nuestro "principal activo" como país, continuó el presidente del Gobierno, son los propios españoles, también los que residen en Barcelona, "capital incomparable de una Cataluña próspera en una España pujante y anclada a una Europa moderna y competitiva".
ante Rajoy y sector automoción
PUIGDEMONT REIVINDICA EL CORREDOR MEDITERRÁNEO
Previamente, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha reivindicado de nuevo la conexión de Cataluña con Europa a través del Corredor Mediterráneo ante el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y de directivos de las principales compañías del sector español de la automoción.
Puigdemont ha defendido la urgencia del proyecto del Corredor Mediterráneo durante la clausura del Connected Hub, espacio de debate de las últimas innovaciones en el campo del coche conectado y las nuevas formas de movilidad, en el marco del Automobile Barcelona, el renovado Salón del Automóvil.
"El rol de las administraciones públicas es clave: acompañar y estimular la iniciativa privada. Y también es fundamental atender los deseos de las instituciones públicas y económicas que quieren estar conectados a Europa a través del Corredor Mediterráneo", ha afirmado el mandatario catalán.
En este punto, ha recordado que el mundo de la automoción es un "aliado" del Corredor Mediterráneo, ya que es un sector eminentemente exportador y que necesita infraestructuras rápidas y seguras.
Además, Puigdemont ha abogado por la eliminación de las barreras legales y administrativas que dificultan ahora que el coche eléctrico gane terreno en España y pueda "ser una realidad".
El presidente catalán, que ha intervenido en el acto antes que Rajoy, ha hecho su intervención en catalán, inglés y castellano, y ha utilizado precisamente esta última lengua para reclamar el Corredor Mediterráneo.
