Seis mansos, seis, salieron por chiquero en la primera de San Isidro
Seis mansos, seis, pero tres con opciones para tocar pelo.
Tres como el segundo que, en tablas, 'al hilo de las tablas', va y viene, con una faena corta y un espadazo, como el que dio Matías Tejela, le hubiera valido una oreja, estoy seguro.
Pero sólo se escuchó silencio...
Tres como el quitno, también para Tejela, con el que firme, -hay que reconocer que aguantó bien los parones-, con una faena medida, sin altibajos, -aunque he de reconocer que terminó en alto, con las 'Bernardinas' y otra buena estocada-, que hubiera calado hondo en los tendidos, por lo que a la petición no se le hubiera podido poner peros.
Peros que tuvo, como así lo entendió el presidente que, con acierto, no atendió a los pañuelos.
Y tres, como el tercero con el que Daniel Luque, muy dispuesto, con muchas ganas toda latarde, en los de recibo al sexto y en los quites al segundo y al tercero, pero que se empeñó en torear en redondo, y no al hilo, 'al hilo de las tablas', lo que dejó todo en división al saludar.
Seis mansos, seis, de los que tres dieron opciones, no así ninguno de los dos de Juan Bautista. El primero por casi inválido y el cuarto por complicado. Que de los otros, tres permitieron tocar pelo.