Próximo a cumplirse el décimo aniversario de La Casa Encendida, su director, José Guirao, hace un balance positivo de este periodo y achaca gran parte de su éxito a la receptividad del público madrileño por "todo lo nuevo", así como al hueco cultural "diferente" cubierto por la institución.
Con una media de 2.500 actividades al año y 755.000 visitas durante el pasado ejercicio, La Casa Encendida de Madrid, centro cultural de la Obra Social de Caja Madrid, celebrará en 2012 sus primeros diez años habiendo logrado sus objetivos, señaló Guirao en una entrevista con Efe.
Este reto ha sido posible "gracias a la filosofía de la institución" que se basa en que "no importan los resultados, sino el punto de partida y el proceso, lo que nos da mucha libertad".
Además, afirmó, La Casa Encendida apuesta por "mezclar en un mismo espacio problemáticas distintas que abarcan también temas sociales, educativos y medioambientales". Otros objetivos son no distinguir entre la alta y la baja cultura y promover actividades de menor formato.
"Madrid necesitaba un espacio de este tipo, que apostara por la contemporaneidad en su fase de inicio y esto ha funcionando perfectamente", en opinión del director.
Gracias a este modelo más flexible que el de las grandes instituciones, con una estructura ágil y más pequeña, "La Casa Encendida está sobreviviendo mejor a la crisis", afirmó Guirao, y reconoció que, aunque se cuenta con menos recursos, han conseguido "mantener la actividad".
Esta actividad va dirigida a trabajar con el arte más joven y contemporáneo "y una vez al año revisar un periodo anterior para buscar en el pasado las raíces del presente, como en una labor arqueológica de la contemporaneidad".Guirao es consciente de que La Casa Encendida "no puede competir con los grandes museos", ni tampoco lo pretende, ya que son espacios diferentes. A eso contribuye positivamente el que Madrid sea "una ciudad abierta y curiosa hacia todo lo nuevo, en la que existe un público muy receptivo a enfrentarse a lo nuevo, aunque no a cualquier cosa".
Próximos a cumplirse los diez años desde su creación en el multicultural barrio de Lavapiés, José Guirao, que lleva al frente de la institución desde que esta abriera sus puertas, reconoce que se siente orgulloso de haber logrado "que en un mismo espacio puedan convivir los diferentes niveles de la cultura".
Así lo demuestran exposiciones como la que dedicó a la pasión por los libros de Antoni Tapies; a la obra más secreta de Juan Muñoz, que contó con la participación de John Berger; la programada sobre el poeta Arthur Rimbaud, con la colaboración de la cantautora norteamericana Patti Smith o la organizada sobre las mil caras de Andy Warhol.
La programación de este aniversario arranca el próximo mes de octubre con la exposición "La caballería roja. Creación y poder en la Rusia soviética. 1917-1945", en la que pinturas, dibujos, esculturas, materiales documentales, registros sonoros y audiovisuales y un recorrido musical analizarán el encuentro entre las especulaciones estéticas y el compromiso político en la Rusia soviética de los años veinte y treinta.
La exposición se centrará en los años que van desde la marcha de la primera caballería roja en la Guerra Civil (1918-1921) a la intervención de la caballería roja en la Segunda Guerra Mundial (1941-1945). El título alude también a dos obras maestras homónimas de la época: el libro de relatos de Isaak Bábel y la famosa pintura de Malévich, que abre la exposición.
Coincidiendo con ARCO, que en su próxima edición tiene a los Países Bajos como invitado de honor, La Casa Encendida dedicará una exposición al arte joven holandés.El ilustrador Diego Lara, que revolucionó el diseño cultural; el poeta José Miguel Ullán; el también ilustrador de animación Daniel Johnston y la artista australiana que reside en España Narel Javelín, estarán presentes también en La Casa Encendida, que dedicará a Louis Bourgeois una importante exposición.
En otoño del 2012 la institución mostrará una selección de las obras de los últimos diez años de esta artista, fallecida en mayo del 2010. Con mucha obra inédita, la exposición "comenzará dónde se quedó la que el Museo Reina Sofía le dedicó en el año 2000", informó Guirao.
Creo que es muy apropiado que celebremos el décimo aniversario con ella ya que Louis Bourgeois es el gozne entre la modernidad y la contemporaneidad. Incomprendida hasta los años ochenta, descubrió el lado contemporáneo del movimiento moderno".
Convencido de que la integración con el barrio es básica, "estamos encantados de ser de barrio, pero esto no impide ser internacionales", José Guirao apuesta por que La Casa Encendida "no pierda el pulso de la contemporaneidad" y continúe cubriendo el hueco cultural que Madrid necesita.