El Metropolitan de Nueva York reconstruye el Adán de Tullio Lombardo

Doce años después de romperse en pedazos en un desafortunado accidente, el Adán esculpido hace cinco siglos por el maestro renacentista Tullio Lombardo volverá a exhibirse la próxima semana en el museo Metropolitan de Nueva York tras una laboriosa reconstrucción. La estatua podrá verse a partir del martes en el museo neoyorquino, que ha necesitado más de una década para recuperar la pieza tras el percance que sufrió el 6 de octubre de 2002.

"Era un lunes por la mañana cuando llegué a trabajar y recibí una llamada (...). Subí y vi la escultura en trozos por todo el suelo", recuerda del fatídico día Carolyn Riccardelli, conservadora del Met, en un vídeo publicado por el museo.

El pedestal de madera que soportaba el Adán había cedido la noche anterior y la figura de mármol había quedado hecha añicos, fragmentada en 28 grandes trozos y cientos de restos más pequeños.

A la estatua, de tamaño real y que se encontraba un patio de la institución, se le rompieron entre otras cosas los brazos y las piernas, así como el tronco de árbol ornamental en que se apoyaba.

"El daño a una pieza tan importante fue algo catastrófico", asegura el conservador Larry Becker, quien destaca que el carácter "icónico" de la escultura y lo poco habitual que resulta encontrar obras maestras renacentistas de ese tipo fuera de Italia.

MÁS DE UNA DÉCADA PARA SU RECONSTRUCCIÓN

El Met decidió de inmediato que el Adán sería reconstruido y cifró inicialmente en unos dos años el tiempo necesario para poder volver a exhibirlo.

Sin embargo, los trabajos se prolongaron durante más de una década, alimentando los rumores de que la pieza era irrecuperable.

Los expertos del museo eligieron un método poco habitual para tratar de devolver la estatua a un estado lo más parecido posible al que tenía antes del accidente.

Así, evitaron opciones agresivas como la de perforar la pieza para introducir tirantes metálicos y unir las distintas partes -algo que se utiliza a menudo en este tipo de reconstrucciones- y optaron por un novedoso tratamiento con fibra de vidrio.

"Si nos hubiesen dicho, tenéis que juntar esto en un mes, habríamos hecho lo que siempre habíamos hecho antes. (...) Pero queríamos alejarnos de eso", explica el especialista George Wheeler.

UNA ESTATUA FUNERARIA QUE IBA EMPAREJADA CON UNA IMAGEN DE EVA

El punto de partida fue una reconstrucción digital en tres dimensiones de todas las piezas y de la escultura en su conjunto, una suerte de puzzle por ordenador, a la que siguió la construcción de una réplica en la que los expertos probaron lo que luego iban a aplicar a la obra original.

Tras años de preparación, el ensamblaje del Adán diseñado por Lombardo comenzó en 2010 y se prolongó hasta este año.

Todo ese proceso podrá verse en la exhibición organizada por el Met, que lejos de esconder la restauración, ha decidido mostrar con todo lujo de detalles y explicaciones los trabajos.

Fechado entre 1490 y 1495, el desnudo de Adán perteneció originalmente a una tumba que se construyó para la duquesa veneciana Andrea Vendramin, e iba emparejado con una estatua de Eva.

A partir de ahora, en solitario, volverá a posar orgulloso y con un cuerpo renovado en uno de los museos más prestigiosos del mundo.