El pintor Antonio de Felipe, uno de los más destacados nombres del "pop art" español contemporáneo, ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Madrid a reconocer que 221 obras firmadas por él en solitario son fruto del trabajo conjunto con la artista japonesa Fumiko Negishi.
La noticia, dada a conocer por el diario El Español, se apoya en la sentencia de la Sección 28 de la Audiencia, especializada en Derecho Mercantil y afecta a algunas de sus obras más famosas, como las series dedicadas a Marilyn Monroe o Audrey Hepburn.
El tribunal considera que Negishi, tal como ella ha venido sosteniendo en los últimos cinco años, tuvo una "relevante contribución" en esas 221 piezas y tiene el "derecho moral de reconocimiento de la autoría".
En declaraciones a Efe en 2018, De Miguel explicó que él a su vez había demandado a su exayudante por injurias y calumnias, según él "porque no ha dicho una sola verdad", ya que ella se encargaba de los "trabajos manuales", los que "puede hacer cualquier otro ayudante de taller" y que "no tenían nada que ver ni con pintar los cuadros, ni con crearlos o idearlos".
"Una sarta de mentiras"
En ningún caso, afirmó, "el ayudante del taller es el artista; ni pinta tus cuadros ni hace nada que no pueda hacer otro ayudante. Esta persona -Negishi- lleva dos años fuera y yo sigo funcionando perfectamente; es todo una sarta de mentiras".
A lo largo de su vida, insistió, "muchos" han intentado "aprovecharse" de él, copiando algunas de sus obras como los cuadros de vacas o sus "audries", aunque lo que le ha sucedido con su exayudante es "lo más doloroso" porque le han arrebatado "lo más sagrado", su identidad.