Lisboa se une a otras muchas ciudades que están cobrando la tasa turística. A partir de 2015 la ciudad portuguesa cobrará 1 euro a casa visitante que llegue vía aeropuerto o puerto, por lo que quedarían fuera de esta tasa los que lleguen a Lisboa por tren, coche o autobús. Un impuesto con el que el Ayuntamiento luso espera recaudar 7 millones de euros.
Esta tasa estará en un principio activa hasta 2019 que es cuando está previsto que termine el Plan Estratégico de Turismo de Lisboa.
Además, a partir de 2016 se tendrá que pagar 1 euros por dormir en Lisboa, excepto los niños. Una tasa que también tienen intención de mantener hasta 2019 y que durante estos años sólo se aplicará en la primera semana de estancia en la ciudad, por lo que los turistas pagarán un máximo de 7 euros. Portugal se une así a otros países como Alemania, Italia, Grecia o Estados Unidos, entre otros, en los que se está cobrando tasas muy similares.