Siempre se ha dicho que el auténtico termómetro deportivo de un país es el atletismo. Si hacemos caso a esta teoría, tendríamos que pensar que España, al igual que su economía, está en depresión. Desde los Juegos Olímpicos de Barcelona –hace ya 20 años- nuestra selección de atletismo ha ido perdiendo posiciones en el panorama internacional y no ha relevado convenientemente a los Cacho, Lamela, Manolo Martínez, Marta Domínguez… etc. En Londres pondremos nuestras esperanzas en Ruth Beitia (altura), la propia Marta Domínguez (3000 obstáculos) o en María Vasco (20 km marcha).
Por lo que respecta a la categoría masculina, Bragado (50 km marcha), Luis Felipe Méliz (longitud) o Mario Pestano (disco) intentarán darnos alguna alegría.
El enfrentamiento en los 100 metros en la categoría masculina: Bolt, Gay y Blake marcará la prueba estrella de estos Juegos Olímpicos.