Sevilla la Nueva: joya cultural y natural a solo 38 kilómetros de Madrid

Si te apetece una escapada que lo tenga todo sin hacer kilómetros de más, apunta este nombre: Sevilla la Nueva.

Está a solo 38 kilómetros de Madrid -menos de lo que tardas en cruzar la ciudad en hora punta- y sorprende por su mezcla de historia, naturaleza, arte urbano, deporte y un calendario de fiestas de lo más variado.

Uno de sus grandes tesoros es el Palacio de Baena, una joya del siglo XVII declarada Bien Protegido, que pasó de residencia nobiliaria a centro cultural y biblioteca municipal. Hoy es el epicentro de la vida del pueblo y fue restaurado por la Comunidad de Madrid con mucho mimo.

Si vas, echa un vistazo al interior porque combina arquitectura clásica con servicios muy actuales.

También merece una parada la Iglesia de Santiago Apóstol, un símbolo local que lleva siglos marcando el pulso religioso y social del municipio. Y si te gusta el urbanismo con sabor antiguo, pasea por sus calles y fíjate en las casas de finales del XIX: están catalogadas como Bienes Protegidos y cuentan historias solo con sus fachadas.

Sevilla la Nueva no solo tiene encanto urbano. A sus afueras está la Dehesa Boyal, un pulmón verde declarado Monte de Utilidad Pública que además forma parte de una ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves). Aquí viven especies tan impresionantes como el águila imperial ibérica o el búho real, así que, si eres de prismáticos y botas de montaña, este es tu lugar.

¿Más naturaleza? Pásate por la Charca de la Garza, un humedal con mucho valor ecológico, ideal para una caminata tranquila. Y si vas con peques, el área recreativa y los miradores son perfectos para un picnic improvisado (o una sesión de fotos para Instagram, que también cuenta).

No esperes solo historia y campo: aquí el arte también tiene su hueco, y en formato XXL. El ejemplo más visible (literalmente) es el Mural del Océano, una obra gigantesca pintada sobre una antigua torre de agua por el colectivo 4Kwallart. Es ya un icono visual del pueblo y se ve desde varios puntos del municipio.

Y eso no es todo. Hay esculturas como el 'Árbol Tallado', un curioso homenaje a la naturaleza, o el hórreo gallego —sí, como los del norte—, donado por una familia local y que se ha convertido en un símbolo etnográfico único en la zona.

Si eres de los que no conciben un finde sin moverse, tienes un montón de rutas cicloturistas y senderos señalizados oficialmente. ¿Sabías que en el municipio hay una 'Gran Bicicleta' igual que las que se ven en el Tour de Francia? Es su forma de declarar amor eterno al ciclismo.

También cuentan con buenas instalaciones deportivas, como la Ciudad Deportiva Héctor Valero y el Pabellón Adolfo Suárez, por si te apetece un plan más activo (o te da por ver un partido local).

Pero si hay algo que hace especial a Sevilla la Nueva, es su capacidad para celebrar todo y con todos. Aquí conviven la Feria Andaluza -que convierte mayo en una pequeña Sevilla con arte flamenco y rebujito- con el Mechanics Fest, una cita para amantes del motor, la cultura custom y el rock and roll más cañero.

Y si te van los libros o el universo friki, también tienen espacio para ti: la Feria del Libro y la Frikicom son dos de las citas más originales del año.

Ah, y en septiembre se celebran sus Fiestas Patronales, con una famosa “chuletada” popular donde reparten ¡más de 3.000 bocadillos gratis! En serio, si te lo pierdes, te lo cuentan y no te lo crees.

Sevilla la Nueva no es solo un sitio bonito cerca de Madrid: es un destino emergente con mucho que ofrecer. Tanto si buscas desconectar, explorar rutas naturales, descubrir arte con historia o simplemente comerte una buena chuleta en buena compañía... este rincón del suroeste madrileño te espera con los brazos abiertos.

🗺️ CÓMO LLEGAR: en coche desde Madrid por la M-501 o en transporte público con buses desde Príncipe Pío.

🎒 PLAN RECOMENDADO: mañana de ruta y mirador, tarde de cultura y arte urbano, noche de tapas y charla en alguna terraza local. ¡Planazo redondo!