El estadio Municipal Carlos Belmonte de Albacete albergará la final de la edición número 88ª de la Copa del Rey de Rugby el próximo 6 de junio (12:30 horas), y podría acoger a cinco mil espectadores si no empeoran las condiciones sanitarias de la pandemia, según se ha indicado este jueves durante la presentación del partido.
La gran final enfrentará a dos conjuntos que nunca antes se han medido en el torneo: el Universidad de Burgos Bajo Cero Aparejadores y el Lexus Rugby Alcobendas, último vencedor de esta competición.
El ayuntamiento de la capital albaceteña ha sido el lugar elegido para la presentación de un evento que el alcalde de la ciudad, Vicente Casañ, ha destacado como “una gran noticia para todos los que amamos el deporte y nos sentimos identificados con sus valores”.
Por su parte, Alfonso Feijoo García, presidente de la Federación Española de Rugby, ha agradecido la excelente acogida que ha tenido en la ciudad y sus instituciones esta competición, deseando que tanto esfuerzo tenga un “retorno en imagen y económico para los albaceteños”.
Feijoo García, que ha viajado hasta Albacete acompañado de la propia Copa del Rey, presentándola en el salón de plenos, ha felicitado a la ciudad por hacer coincidir dos finales de la Copa del Rey, rugby y baloncesto en silla de ruedas, en un mismo fin de semana, “algo que creo que es la primera vez que sucede en nuestro país”.
El presidente del Club de Rugby Albacete, Hernán Arizmendi, que ejerce de anfitrión en su trigésimo aniversario, ha reconocido en su intervención que sin el respaldo de las instituciones este logro “no hubiera sido posible”, ya que la organización de un evento de estas características requiere de unas necesidades de preparación, infraestructuras y económicas “que no podían ser asumidas por nuestro club”.
La primera edición de este torneo se jugó en el año 1926 y la ganó el mismo equipo que aún lidera el palmarés histórico con 16 títulos, el FC Barcelona.
En aquella ocasión, el torneo ostentaba la denominación de Campeonato de España de Rugby, que no hay que confundir con la competición liguera, actualmente Liga de División de Honor, que no comenzó hasta la temporada 1952-53 y no se asentó hasta la 1969-70.
El año 2016 supuso un enorme impulso a nivel mediático y en cuanto a reconocimiento hacia esta competición, ya que la final ganada por el SilverStorm El Salvador (actual subcampeón) ante el VRAC Quesos Entrepinares contó con la presencia del Rey Felipe VI y se celebró en el Estadio José Zorrilla.
Fue el primero de una serie de grandes eventos organizados en torno a un partido emblemático, con el Ciutat de València y el Central de la Complutense prolongando esta fantástica tendencia antes de la pandemia que ahora tendrá parada en tierras manchegas.