El base Stephen Curry volvió a liderar el ataque balanceado de los Warriors de Golden State que se impusieron por 104-90 a los Rockets de Houston en el quinto partido de las finales de la Conferencia Oeste y ganaron la serie 4-1 al mejor de siete.
Los Warriors, el equipo con la mejor marca de la liga (67-15), tendrán la ventaja de campo cuando se enfrente en las Finales de la NBA a los Cavaliers de Cleveland (53-29), que se proclamaron campeones de la Conferencia Este después de barrer la serie 4-0 ante los Hawks de Atlanta.
DOS ENTRENADORES NOVATOS EN LA FINAL
La nota histórica de las Finales de la NBA será que por primera vez ambos equipos tendrán en el banquillo a dos entrenadores novatos, con Steve Kerr, que dirige a los Warriors, y David Blatt, que estará al frente de los Cavaliers.
Durante las últimas 15 temporadas, los entrenadores que alcanzaron las Finales de la NBA con los equipos campeones en las respectivas conferencias les llevó un promedio de al menos 12 años de experiencia dentro de la competición.
El equipo de Golden State llega a las Finales de la NBA por primera vez desde 1975, cuando se proclamaron campeones, mientras que los Cavaliers vuelven después que lo hicieron en la temporada del 2007, pero sin que pudiesen conseguir el título al ser barridos 4-0 por los Spurs de San Antonio.
Curry con 26 puntos, incluidos 3 triples de 11 intentos, ocho rebotes, seis asistencias y cinco recuperaciones de balón, encabezó una lista de cuatro jugadores de los Warriors que tuvieron números de dos dígitos.
El alero Harrison Barnes con 24 puntos, su mejor marca en los playoffs, y siete rebotes, surgió como factor sorpresa ganador, al ser el segundo máximo encestador.
Mientras que el escolta Klay Thompson llegó a los 20 tantos, incluidos cuatro triples, y el pívot nigeriano Festus Ezeli, que salió de reserva, se convirtió en el sexto jugador al conseguir 12 puntos, nueve rebotes y dos tapones.
DOMINIO REBOTEADOR
El alero Draymond Green y el pívot australiano Andrew Bogut también fueron decisivos en el juego interior al aportar 13 y 14 rebotes, respectivamente, que permitieron a los Warriors dominar esa faceta del juego con 59 por tan sólo 39 de los Rockets.
El dominio que tuvieron los Warriors dentro de la pintura fue clave, en un partido, en el que ninguno de los dos equipos estuvo brillante a la hora de los aciertos con los tiros a canasta, aunque los Warriors al final fueron superiores.
El escolta brasileño Leandro Barbosa jugó 11 minutos como reserva con los Warriors y aportó siete puntos al anotar 1 de 2 tiros de campo, falló un intento de triple, y acertó 5 de 6 desde la línea de personal, capturó dos rebotes y dio una asistencia.
Los Warriors, que dejaron atrás 40 años de esperar antes de poder vivir de nuevo el sueño de unas Finales de la NBA, ahora tendrán como último escollo que superar a los Cavaliers con su estrella LeBron James.
El duelo entre James, que disputa sus quinta Finales de la NBA consecutivas, las cuatro anterior lo hizo con los Heat de Miami, y Curry, ambos ganadores del premio de MVP, comenzará a partir del próximo jueves, con el primer partido a disputarse en el Oracle Arena, de Oakland.
Aunque comenzaron de nuevo lentos en las acciones ofensivas, los Warriors al final encontraron su mejor producción en ataque y los Rockets no tuvieron respuesta, como les sucedió en tres de los cuatro partidos anteriores que ambos equipos disputaron. Los Warriors concluyen la temporada en los duelos contra los Rockets con marca de 8-1, incluida la barrida de 4-0 que lograron durante la temporada regular.
Aunque los Rockets tuvieron a seis jugadores con números de dos dígitos, el escolta estrella y su máximo encestador, James Harden, que en el cuarto partido había establecido nueva marca individual de playoffs con 45 puntos, esta vez, dio la de cal al conseguir sólo 14 puntos. Harden anotó 2 de 11 tiros de campo, falló los tres intentos de triple que hizo, y maquilló la aportación con 10 de 13 tiros desde la línea de personal.
El líder encestador de los Rockets tampoco tuvo su mejor control del balón y lo perdió 13 veces, la peor marca de su carrera en la competición de los playoffs. El pívot Dwight Howard volvió a ser el mejor de los Rockets en el juego interior al aportar un doble-doble de 18 puntos y 16 rebotes, mientras que el base titular Jason Terry y el escolta reserva Corey Brewer llegaron a los 16 tantos.
El veterano base argentino Pablo Prigioni disputó siete minutos como reserva de los Rockets y se fue sin anotación al fallar el único tiro que hizo a canasta y que fue un intento de triple, dio una asistencia y recuperó un balón.