El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha impuesto dos partidos de sanción al delantero argentino del Barcelona Leo Messi por su expulsión en la final de la Supercopa de España ante el Athletic de Bilbao.
La RFEF confirmó el castigo adoptado por el órgano disciplinario para el jugador azulgrana en aplicación del artículo 123.2 del Código Disciplinario, Violencia en el juego, por su comportamiento en la final jugada en Sevilla, en la que el Athletic ganó el título (2-3).
"Producirse de manera violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, siempre que la acción origine riesgo, pero no se produzcan consecuencias dañosas o lesivas, se sancionará con suspensión de uno a tres partidos o por tiempo de hasta un mes", señala el artículo.
El mismo añade que "si la acción descrita en el párrafo anterior se produjera al margen del juego o estando el juego detenido, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 98 del presente Código".
Messi recibió una tarjeta roja por primera vez como jugador del Barcelona en el minuto 120 del encuentro después de que el colegiado Jesús Gil Manzano revisara la acción en el vídeo de una agresión sin balón al jugador del Athletic Asier Villalibre.
Messi cumplirá la sanción en los dos siguientes partidos del Barcelona, por el orden en que tengan lugar, de acuerdo con el artículo 56.8 del código disciplinario de la RFEF, aclaró el organismo.
El argentino se perderá el encuentro de este jueves en Cornellá en la Copa del Rey y el del próximo domingo día 24 en Elche dentro de la jornada 20 de LaLiga Santander.