672 Fieles del Mirandés se preparan para desembarcar en La Catedral

Un total de 672 fieles del Mirandés, repartidos en 10 autobuses, se están preparando para viajar a Bilbao, hasta San Mamés, "La Catedral", y empujar a su equipo en la misión de obrar el milagro ante el Athletic Club, remontar la eliminatoria (1-2 en la ida) y acceder a la final de la Copa.

Según han precisado fuentes del Mirandés, conjunto de Segunda División B, el club bilbaíno les remitió 672 entradas, de las cuales 472 pertenecen a Preferencia Sur y 200 a Preferencia Tribuna Norte de San Mamés.

Ante la avalancha de peticiones, la entidad burgalesa optó por realizar un sorteo ante notario y con un programa informático que designó a los socios afortunados con derecho a una entrada.

Eso ocurrió el pasado sábado y fue ayer cuando los abonados tuvieron que acudir a las oficinas del club para recoger las entradas que les permitirán presenciar "in situ" un choque histórico para su club (San Mamés, 22,00 horas).

De estas 672 personas, fuera parte de las que pudieran adquirir entradas en Bilbao y destinadas a la afición rojiblanca, unas 500 viajarán o ya lo han hecho en los diez autobuses que las peñas han dispuesto.

El primero ha salido de Miranda de Ebro (Burgos) a las 11,00 horas, mientras que los siguientes lo harán a las 17,30, 18,00, 18,30 y 19,00 horas.

Un desembarco con el objetivo de apoyar al "matagigantes" de esta edición de la Copa del Rey, el Mirandés, conjunto que ya se ha colado en la historia del fútbol español tras apear a Villarreal, Racing de Santander y Espanyol de Barcelona.

En la ida celebrada hace una semana en Anduva, el Athletic Club de Bilbao fraguó una ventaja de 1-2, aunque la afición rojilla y el propio equipo creen en que puede dar la vuelta a la eliminatoria en el feudo del cuadro bilbaíno y, así, lograr la mayor proeza de todas: llegar a la final de la Copa del Rey.

Una empresa para la que no estarán solos, sino que, a buen seguro, los 672 hinchas del Mirandés que estarán en San Mamés secarán sus gargantas por empujar un poco más a sus futbolistas, admirados como héroes no sólo en Miranda de Ebro, sino en toda España. Pase lo que pase, su gesta ya se ha convertido en leyenda.