La selección española comenzó la segunda fase del campeonato de Europa de la peor manera posible, con una derrota, 79-75, ante Grecia que le complica mucho la vida de cara a los cuartos de final.
El equipo español se queda ahora sin margen de error y ante Finlandia, el sábado, y ante Italia, el lunes, deberá ganar para cumplir con el objetivo.
Grecia y España son dos equipos que se respetan y eso quedó claro desde el primer momento, aunque fueron los españoles los primeros que se adelantaron en el marcador, con una canasta de Marc Gasol y un triple de José Manuel Calderón, 0-5 (mín 1.15).
Las defensas de ambos equipos no permitieron alegrías ofensivas y la selección pudo mantener ventajas relativamente cómodas. La primera nota negativa llegó con la segunda personal de Marc (6-12, min.5.30), pero el pívot de Memphis siguió en pista.
La tercera personal de Marc Gasol llegó demasiado pronto, en el minuto 8.40 (14-24) y esa acción condicionó el partido. En ese minuto, los griegos no arreglaron mucho el marcador, 16-26.
SEGUNDO CUARTO
En el segundo cuarto y con Marc Gasol en el banco por las tres personales, el panorama cambió radicalmente. Juan Antonio Orenga intentó blindar al equipo con una zona y en esa situación emergió Spanoulis para anotar cinco puntos seguidos y conseguir la primera ventaja helena (37-34, min.18).
Antes, la falta de confianza en ataque hizo que los griegos consiguieran un parcial de 13-4, en los primeros cinco minutos del cuarto, sin que los españoles encontraran la forma de anotar de forma fluida.
Con 6 de 9 triples griegos en el segundo periodo quedó claro que la zona hispana fue un auténtico fracaso y que en ataque, con 4 de 11 en tiros de 2 y 0 de 4 en triples los nacionales no podían aspirar a mucho.
Al descanso, 41-38 y la sensación de que el roto podía haber sido mayor, si Rudy Fernández (11 puntos) y Víctor Claver (7 y 7 rebotes) no hubieran estado tan activos.
VUELVE MARC
La vuelta de Marc en el tercer cuarto, cambió la cara del equipo. Rudy con un dos más uno empató (41-41) tras minutos y medio de juego y Claver devolvió la prevalencia en el marcador (41-43) un minutos después.
La defensa mejoró, volvió a eclipsar el ataque griego y siempre con el riesgo permanente de la cuarta falta de Marc Gasol comenzó a fraguar los cimientos de un nuevo partido.
Al final del tercer cuarto, 52-57 y mejores sensaciones españolas.
Otro triple de Spanoulis volvió a acercar a los griegos en el marcador, 60-61 min.33.40, y pocos segundos después devolvió con una penetración, 62-61, el mando a los helenos.
El partido ya estaba en los minutos calientes y a falta de cuatro, 64-64, Claver vio la quinta falta personal. Bourousis inclinó la balanza con cuatro puntos seguidos, 68-64, y el panorama español comenzó a oscurecerse.
Spanoulis dirigió con brazo firme, apareció Michail Bramos para ejecutar desde la media y larga distancia y el equipo español no pudo evitar que la victoria se le escapara de entre los dedos. Ahora ya no tiene margen de error posible en los dos partidos que le quedan.
Grecia (16+25+11+27): Zisis (4), Spanoulis (20), Papanikolaou (5), Kavvadas (3) y Printezis (10) -equipo inicial-, Sloukas (7), Bourousis (10), Perperoglou, Mavrokefalidis (1), Kaimakoglou (11) y Bramos (8).
España (26+12+19+18): Aguilar (3), Rudy (20), Calderón (5), Ricky (6), y Gasol (20) -equipo inicial-, Rodríguez (3), Rey, Claver (9), Llull (2), San Emeterio (4) y Mumbrú (3).
FESTÍN DE CROACIA ANTE FINLANDIA (88-63)
Croacia se dio un festín ante una débil Finlandia, 63-88, que sin juego interior se vio completamente superada por los balcánicos.
Una defensa alternativa, al hombre tras canasta y en zona de acoplamiento si no había anotación, fue la única opción que plantearon los finlandeses ante la superioridad física, en centímetros y kilos, y técnica de los croatas.
Si a estas circunstancias se le une la falta de acierto en el tiro de media distancia de los nórdicos, 2 de 14 en tiros de dos y 3 de 15 en triples al descanso, está claro que el marcador al término de los dos primeros cuartos fue benévolo con Finlandia, 20-39.
La selección de Eslovenia, anfitriona del Eurobasket, puso punto y final a la imbatibilidad de Italia (84-77) en la primera jornada del Grupo F -perteneciente a la segunda ronda- en un partido en el que destacó la aportación de Goran Dragic, que finalizó con 22 puntos y 6 asistencias.
