El Movistar Estudiantes femenino no tuvo opciones en su visita al potente Asvel Lyon francés, que se tomó la revancha del partido de ida y le superó con claridad en la cuarta jornada de la fase regular de la Eurocopa en un choque que llegó igualado al descanso pero en el que las madrileñas se vieron lastradas por su pésimo tercer cuarto (72-51).
Desde el comienzo, las locales se mostraron más contundentes de cara al aro, aunque su rival no se amilanó y logró llegar al final de los primeros diez minutos con una desventaja de solo cuatro puntos (24-20). En la reanudación, metieron una marcha más las galas y se fueron de diez pasado el ecuador del segundo cuarto, lo que obligó a Alberto Ortego a pedir tiempo muerto para evitar males mayores.
La medida tuvo su efecto y las madrileñas, que acusaban las bajas de Mariona Ortiz por lesión y Arica Carter por problemas burocráticos, mejoraron en su juego y se fueron al descanso solo tres abajo (38-35, min 20).
Tras el paso por vestuarios, volvieron a saltar a la pista más fuertes las líderes del grupo, que con un parcial de salida de 11-0 en tres minutos y medio empezaron a encarrilar el choque al situarse catorce arriba. La cosa no mejoró para el Movistar Estudiantes falto de ideas que, sin capacidad de reacción, se vio perdiendo de veinte a tres minutos del acto definitivo (57-37).
El 24-6 del tercer cuarto dejó sin opciones a las colegiales, ya que los últimos diez minutos tuvieron poca historia. El equipo madrileño llega al parón por la ventana de selecciones con un balance de dos triunfos y dos derrotas y clasificado en tercera posición del Grupo J, con seis puntos, uno menos que el Asvel y el MBK Ruzomberok.