El Vicente Calderón dio este domingo su último adiós a Luis Aragonés, fallecido este sábado a los 75 años, con emotivos homenajes previos al duelo ante la Real Sociedad, que estuvieron acompañados por miles de muestras de cariño desde la grada, donde fue el gran protagonista de la tarde.
El feudo colchonero se rindió a uno de sus líderes. Primero en las horas previas al encuentro fueron muchos los aficionados atléticos que se acercaron a la puerta 8 -dorsal de Luis- del estadio Vicente Calderón para depositar allí recortes de periódicos, bufandas y velas en honor al que fuera gran estandarte del club.
Una vez dentro del estadio, la emoción se desbordó. Diez minutos antes del pitido inicial grandes leyendas del conjunto colchonero como Adelardo, Gárate, un emocionado San Román, Santi o Caminero entre otros saltaron al campo portando una camiseta gigante del Atlético con el 8 y el nombre de Luis Aragonés a la espalda, mientras que las banderas rojiblancas estaban a media asta en el estadio.
Un estadio engalanado para la ocasión, con innumerables pancartas entre las que destacaba una imagen gigante de Aragonés en el Fondo Sur junto con la leyenda Luis Aragonés leyenda atlética D.E.P.. 50.000 almas que recibieron a sus veteranos con el cántico de Luis Aragonés, Luis Aragonés.
La camiseta gigante se detuvo en un momento dado y se guardó un emotivo minuto de silencio acompañado por imágenes de canteranos guardando un minuto de silencio este fin de semana intercaladas con momentos históricos de el 'sabio de Hortaleza' con su club de toda la vida.
Cuando los 22 protagonistas saltaron al campo se produjo probablemente uno de los momentos más mágicos de la tarde. Los actuales jugadores atléticos se abrazaron con los ex jugadores en el centro del campo y guardaron un nuevo minuto de silencio, ante unos aficionados que llenaron el Calderón de lágrimas.
8 MINUTOS DE SILENCIO POR EL 'ZAPATONES'
La afición colchonera decidió alargar 8 minutos más el silencio. Decidió que uno se le quedaba corto al zapatones -el mote que a él más le gustaba-. Así durante esos 8 minutos se disputó el partido en un estadio en el que apenas se escuchaba un murmullo. Cuando el dorsal de Luis apareció en el videomarcador la grada rompió en cánticos en honor de su ídolo.
En un ámbito más institucional, el club del Manzanares realizó una misa en la Capilla del Vicente Calderón en honor de Aragonés a las 18.30 horas, 30 minutos antes del comienzo del choque ante la Real Sociedad.
Al acto acudieron el Secretario de Estado para el Deporte Miguel Cardenal; el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco; el presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas; representantes de todos los clubes madrileños de Primera División y los ex jugadores atléticos que posteriormente saltaron al césped.
El sabio de Hortaleza, que entrenó al Atlético de Madrid en tres etapas, ganó una Liga (1977) y cuatro Copas del Rey, tres con los colchoneros (1976, 1985 y 1992). Como jugador cambió la historia rojiblanca al marcar 160 goles en los 360 partidos que disputó en Primera División.
Este domingo, ante su afición, recibió el último homenaje. Uno más de los que ya recibió en vida. En 2008 fue nombrado mejor entrenador del mundo por la Federación de Historia y Estadística y, siete años antes ya había recibido la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo.
En su etapa como futbolista, Aragonés ganó dos Copas (1965 y 1972) y tres Ligas (1966, 1970 y 1973) y es, todavía hoy, el único jugador del conjunto colchonero que ha marcado un gol en una final de Copa de Europa en aquel fatídico encuentro de 1974 ante el Bayern de Múnich.