Marco Asensio fue el protagonista de una nueva edición del programa Campo de estrellas, en Realmadrid TV. El centrocampista repasó sus orígenes y cómo se formó como futbolista hasta llegar al club blanco: “Zidane era mi ídolo de pequeño, tenía un póster suyo en la habitación. Que ahora sea mi entrenador es un orgullo porque aprender cosas de él y seguir sus consejos es una pasada”.
“Mis padres me han contado que el primer nombre de sus hijos lo elegía mi padre y el segundo, mi madre. Ella, que es holandesa, me puso Marco por Marco van Basten. De pequeño me regalaron un balón y me recuerdo jugando al fútbol y otros deportes, aunque también mis padres siempre hicieron mucho hincapié en los estudios. Desde pequeño, no sé por qué, empecé a ser del Real Madrid y siempre lo admiré”.
SU ENCUENTYRO CON FLORENTINO
Encuentro con Florentino Pérez: “Un día de excursión con la familia estábamos dando un paseo por el puerto y allí estaba el barco de Florentino Pérez. Mi madre le reconoció y le llamó para hacernos una foto, y le dijo que yo iba a ser jugador del Real Madrid. Casualidades de la vida, así ha sido y él también recuerda aquella anécdota tan bonita”.
Pérdida de un ser querido: “El fallecimiento de mi madre fue un golpe muy duro. Éramos una familia unida y nos quedamos mi padre, mi hermano y yo para sacar todo adelante. Nos apoyábamos mucho, nos hemos ayudado mucho y seguimos muy unidos. Mis goles siempre van dedicados a ella”.
“La semana de mi debut con el Mallorca me dijeron que iba a entrenarme con la primera plantilla. Tenía 17 años y fue una sorpresa. Los veteranos me ayudaron a entrar en el equipo. Sentía hasta vergüenza al marcar un gol a Aouate. No esperaba jugar y salí en el 86’ y fue una sensación increíble, algo que había soñado toda mi vida”.
SU LLEGADA AL REAL MADRID
Fichaje por el Real Madrid: “En invierno me dice mi agente que estaba el Real Madrid interesado en mí. Llamaron varios clubes, hubo lío. Pero me llamó Florentino antes de un partido para decirme que iba a ser jugador del Real Madrid. Fue todo en un día: viajamos a Madrid, firmé, visité el Bernabéu y Valdebebas y nos volvimos a Mallorca para terminar la temporada. Fue todo rápido e intenso, pero la satisfacción fue enorme”.
Etapa en el Espanyol: “Se decidió que me fuera cedido, que creo que era lo mejor porque era muy joven y me vendría bien seguir jugando. El año en el Espanyol me vino muy bien para coger experiencia y hacerme un poco más jugador de fútbol”.
Regreso al Real Madrid: “Un día en la pretemporada, después de cenar, el míster me llamó para hablar y me dijo que quería que me quedase en el equipo y que iba a ser titular en la Supercopa de Europa. Qué mejor manera de empezar: titular, victoria y título con un gol. Y luego quedará para la historia que marqué en mis debuts en el resto de competiciones”.