El fenómeno de las tiendas efímeras se extiende en Madrid. Cada vez son más las empresas que prefieren organizar ventas intensivas a mantener infraestructuras comerciales permanentes. En la Calle Velázquez, una firma española de muebles ha ocupado las cuatro plantas y el jardín de un antiguo palacete para ofrecer piezas de otras temporadas con descuentos de hasta el setenta por ciento
