Canencia, una frondosa y suave sorpresa

  • La senda ecológica de poco más de 6 kilómetros es perfecta para toda la familia
  • Su poca altitud ofrece unas temperaturas suaves todo el año
Chorrera de Mojonavalle, en Canencia
La chorrera de Mojonavalle, punto principal y más espectacular de la senda ecológica de Canencia |Telemadrid

La senda ecológica de Canencia es uno de los paseos más sorprendentes que pueden realizarse por la Sierra Norte de la Comunidad de Madrid, pues permite contemplar la variedad y riqueza de la flora de la zona así como la Chorrera de Mojonavalle, punto central y más espectacular del recorrido.

El número de especies es tan abundante como asombroso, pues hay incluso, algunas tan poco habituales como el abeto de Douglas, otras propias de distintas altitudes como el abedul y varias protegidas como el acebo y el tejo. Además, los melojos y los pinos silvestres alcanzan alturas infinitas.

Todos estos árboles están presentes en los escasos 6,5 km de la ruta, que se recorre sin ninguna dificultad en aproximadamente 1 hora y 45 minutos, aunque el tiempo puede prolongarse en función de lo que quiera detenerse a contemplar la naturaleza.

El itinerario circular a pie tiene su punto de partida y de llegada en el área recreativa Puerto de Canencia, y su desnivel es tan suave (225 m.) que apenas se aprecia y es perfecto para realizar en familia.

El puerto se encuentra a 56 km. al norte de la capital, a 7 de Miraflores y 9 del pueblo que le da nombre. Es una de las cimas "modestas" de la sierra, puesto que sus 1.524 m. de altitud le confieren un carácter más frondoso y la protegen de vientos y temperaturas extremas.