Delfina Ferrer, única entrenadora de la Superliga Masculina

Delfina Ferrer dirige el Vóley Playa Madrid y es la única mujer que entrena en la Superliga Masculina 2.

Multifacética, entrenadora, profesora y comentarista comenzó su formación en Argentina. Se mudó a Madrid y siguió estudiando, dirige un equipo masculino y es una apasionada de del voleibol.

¿Cómo llevas ser la única entrenadora en la Superliga 2 Masculina?

Lo llevo bien y animo a todas las entrenadoras a que den un pasito más hacia adelante, hay muchas mujeres muy capaces que lo harían muy bien en el voleibol nacional.

¿Cómo fueron tus inicios en los banquillos?

Siempre siendo jugadora pensé que iba a ser entrenadora. La puerta se me abrió cuando con 18 años me rompí los ligamentos cruzados de la rodilla. Ahí tuve un parón de seis meses en mi vida que aproveché para hacer el curso de entrenador en Argentina.

¿Dónde empezaste a entrenar?

Comencé en Argentina con equipos en categorías sub’14 y sub’16. Cuando llegué a España arranqué con un equipo juvenil masculino. Esta es mi segunda temporada en el VP Madrid de la Superliga 2 Masculina.

¿Cómo fue esa llamada del VP Madrid?

Las mujeres siempre dudamos un poquito de nosotras mismas, me lo quise pensar un poco. Hablé con entrenadores y con entrenadoras, que me dijeron ‘tira para adelante, que te va a gustar y te ayudará a crecer’.

¿Tienes algún tipo de desventaja por tu condición de mujer?

Al contrario, son ventajas. Si bien tengo mi parte competitiva, toda mujer tiene una parte sensible, hay a veces que creo que hay jugadores más sensibles que otros y se puede tener una mano izquierda para tratar con ellos.

¿Qué tal con los colegas entrenadores?

Tengo mucha suerte, me han acogido muy bien, no tengo nada mala que decir en su contra, está siendo, de momento, una experiencia muy buena.

¿Cómo lleváis en el VP Madrid la temporada?

Lo que queda por delante son desafíos de superarnos como equipo y como jugador, a partir de ahí la liga te pone donde tienes que estar por un montón de factores, algunos se pueden controlar y otros no, porque el rival también entrena duro.

Mejores Momentos

Programas Completos

Más de Voleibol