'Los bufos madrileños', la Compañía Nacional de Teatro Clásico homenajea a Francisco Arderius
- El Teatro de la Comedia acogerá desde el 21 de diciembre al 14 de enero este espectáculo que recupera el género bufo a través de una adaptación de 'Los órganos de Móstoles' de Larra
La Compañía Nacional de Teatro Clásico homenajea al teatro musical del siglo XIX, con 'Los bufos Madrileños'.
El nuevo espectáculo de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, homenajea la figura de Francisco Arderius (1836-1886) y al género bufo a través de una adaptación del libreto 'Los órganos de Móstoles' de Luis Mariano de Larra.
El Teatro de la Comedia acogerá del 21 de diciembre a 14 de enero esta representación que les ha permitido "explorar la tradición del teatro musical clásico" a través de la puesta en valor de "grandes tesoros artísticos" de este género, ha explicado Lluís Homar, director de la Compañía de Nacional de Teatro Clásico (CNTC), este martes en una rueda de prensa.
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El género bufo revolucionó el teatro español de la época del que forma parte 'Los órganos de Móstoles', con libreto de Luis Mariano de Larra y música de José Rogel.
El actor Rafa Castejón se pone al frente de la obra, recuperando la figura del actor y empresario teatral Francisco Arderius, que puso el teatro patas arriba en los convulsos años previos a la revolución de 1968al importar a nuestro país lo que serían los cimientos de los actuales musicales.
La obra, dirigida y adaptada por Castejón, está dividida en dos partes e incluye un prólogo de 15 minutos con números musicales de la época que sirven, como ha enfatizado el director, "para contar la historia de los bufos y Arderius". Esto dará paso a la ficción de 'Los órganos de Móstoles', que permitirá que el público entienda cómo era aquel teatro.
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La adaptación no altera ni el argumento ni la temática original, tanto del libreto como de la música. De esto último se ha encargado Antonio Comas, director musical de la obra, que hizo una reducción a piano de la partitura para hacerla asequible a la puesta en escena.
En ella todos los actores cantan, bailan y hablan para recuperar y reivindicar "a todos los actores-cantantes", figura que se está perdiendo en el teatro, según ha dicho Nuria Castejón, directora adjunta de su hermano y responsable de coreografía.
