El lago de Carezza se encuentra entre las montañas, en plenos Dolomitas, una auténtica maravilla que con sus aguas cristalinas refleja todos los colores del imponente entorno natural.
Según una leyenda local, en estas aguas vivía una ninfa, y un hechicero, para conseguir su amor, creó un arcoíris sobre el lago. La ninfa se enteró del hechizo y escapó. Desesperado, el hechicero rompió el arcoíris en un millón de pedazos y cayeron al lago, por eso también se conoce a estas aguas como “el lago del arcoíris”.
El lago se encuentra en la cadena montañosa de Los Dolomitas, patrimonio de la UNESCO, y que se extiende desde la ciudad de Bolzano hasta Venecia, una zona muy turística que recibe casi 6 millones de visitas al año.
