La infancia y primera oportunidad artística de Raffaella Carrà

  • La italiana demostró desde muy pequeña su interés por el mundo del espectáculo 

Hija de Iris y Raffaelle, Raffaella se enamora de la música desde muy pequeña gracias a su fuente de inspiración, su abuela Andreina.

"Me gustaría ser coreógrafa porque me gusta muchísimo la creatividad"

"Cuando era niña me gustaba mucho poner botones en la alfombra y hacer coreografías con música clásica", contó la artista en una entrevista.

Y para empezar a realizar su sueño, la pequeña Carrà viaja a Roma con tal solo nueve años donde conoce a la que sería su talismán, la prestigiosa bailarina Gia Russkaya.

Pero la oportunidad de Raffaella llega en 1952, a punto de cumplir los diez años, al debutar en la gran pantalla con 'Tormeto del passato', su primera huella como artista.

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