El Ayuntamiento de Madrid asumirá la limpieza si no hay acuerdo en 48 horas

  • Los servicios de Tragsa se mantendrían "tanto como dure el conflicto" y los costes se repercutirán
  • El PSOE pide a Botella que dimita por convertir Madrid en "capital de la basura"

El Ayuntamiento de Madrid ha salido al paso de las críticas vecinales y las quejas de empresas y comercios en la novena jornada de huelga indefinida de limpieza viaria con la advertencia de que irá a la Fiscalía y asumirá los servicios mínimos si las concesionarias y los sindicatos no pactan en 48 horas. La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha calificado la huelga de "salvaje" y ha advertido de que la ciudad "no puede esperar más a que se pongan de acuerdo" las adjudicatarias y los representantes de los trabajadores, que convocaron los paros en el servicio de limpieza viaria y mantenimiento de jardines en protesta por la presentación de un ERE para más de 1.100 de los 6.000 trabajadores del sector.

Si no hay un acuerdo, ha avisado Botella, el Ayuntamiento trasladará a la Fiscalía que no se están cumpliendo los servicios mínimos y las consecuencias de ello, y a continuación encargará a la empresa pública Tragsa que se haga cargo del cumplimiento de los servicios mínimos, cuyo coste deberán asumir las adjudicatarias, "tanto tiempo como dure el conflicto".

Botella ha descartado pedir cualquier tipo de ayuda al Ministerio de Defensa para que el Ejército colabore en la limpieza, puesto que según ha argumentado no existe un riesgo para la salud de los ciudadanos.

La alcaldesa de Madrid ha lanzado el ultimátum a empresas y sindicatos en un día en el que han arreciado las críticas de vecinos y partidos políticos y las reclamaciones de los empresarios y comerciantes, que han apremiado a poner solución al conflicto.

De hecho, la iniciativa de presentar una denuncia ante la Fiscalía para exponer los efectos de la huelga ha sido defendida horas antes del anuncio de la alcaldesa por la asociación Defensor del Paciente y el grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid.

La novena jornada de huelga de limpieza viaria en la ciudad se ha saldado sin ningún detenido hasta el momento por actos vandálicos o violentos y sí se han identificado a diez personas más por desórdenes públicos, según ha indicado fuentes de la Delegación del Gobierno. Así, la cifra de detenidos por actos violentos se mantiene en 16 mientras que en el caso de los identificados alcanzan las 221 personas, diez más que ayer. A los arrestado se les acusa, según los casos, de daños, desórdenes públicos, resistencia y desobediencia, por quemar contenedores y tirar basuras a la vía pública, fundamentalmente.

TOMAR CARTAS EN EL ASUNTO

Un día más, asociaciones de vecinos y viandantes se han quejado de la presencia de desperdicios en las calles y han llegado a recalcar, como en el caso de la asociación La Corrala -zona de Embajadores- que por algunas zonas "no se puede atravesar la calle". "La alcaldesa tiene que tomar ya cartas en el asunto para que el problema no sea ya de salubridad", expone su portavoz.

La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) de Madrid ha instado al Ayuntamiento, con carácter de urgencia, a que medie en el conflicto de limpieza y demuestre a los ciudadanos que se preocupa por ellos.

También los empresarios de Madrid han advertido de "los graves perjuicios" que está causando la huelga de limpieza viaria sobre la actividad económica de la ciudad y, en particular, sobre la comercial, que vive el arranque de la campaña navideña.

Las críticas a Botella desde partidos políticos y sindicatos se han recrudecido hoy e incluso han llegado al Congreso de los Diputados, donde el diputado del PP Vicente Martínez Pujalte ha llegado a señalar que el Ayuntamiento tiene que "presionar" a las empresas ante la "deplorable" situación de las calles de la capital.

La imagen de Madrid preocupa también a la Comunidad de Madrid, cuya responsable de Turismo ha apoyado la gestión de Botella pero ha reconocido que los efectos del "vandalismo" en la huelga dañan la recuperación y la imagen de Madrid en todo el mundo.

La Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (Anecpla) ha indicado hoy que, pese a que ya han empezado a verse ratas y cucarachas alrededor de la basura en Madrid, su número no es muy significativo, por lo que por el momento su presencia no entraña riesgos para la salud pública.

No obstante, la presidenta de la asociación, Santa Gil, ha advertido de que si no se toman las medidas oportunas para "cortar" a tiempo con una posible proliferación de estos animales puede aumentar el riesgo de plagas y, consecuentemente, de propagación de enfermedades.

LA OPOSICIÓN RECHAZA LAS MEDIDAS ANUNIADAS POR BOTELLA

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha pedido la dimisión de la alcaldesa de la capital, Ana Botella, por convertir Madrid en la capital de la basura como consecuencia de "su incapacidad" para gestionar la huelga de limpieza que cumple hoy su novena día.

En rueda de prensa, Lissavetzky ha calificado como "una broma" fruto de una gestión "desastrosa" la advertencia de la alcaldesa de que llevará a la Fiscalía la situación creada por esta "huelga salvaje" y encargará a la empresa pública Tragsa los servicios mínimos si no hay acuerdo entre empresas y sindicatos en 48 horas.

El portavoz socialista ha sostenido que la decisión de la alcaldesa refleja "la soberbia por la incapacidad" de la gestión y ha acusado a la regidora de llevar a Madrid a una situación "completamente insostenible".

"Madrid ha pasado de ser la capital de los juegos a ser la capital de la basura", ha criticado el socialista, que ha subrayado que comerciantes, prensa internacional e incluso su propio partido están calificando su gestión de la huelga "como un desastre".

Sobre el anuncio de Botella, ha señalado que optar por una empresa pública para solucionar temporalmente este conflicto es un manera de reconocer "que la empresa privada no funciona".

El grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento ha considerado que las nuevas medidas anunciadas por la alcaldesa de Madrid suponen una "huida hacia delante". El portavoz del grupo Angel Pérez considera que la alcaldesa "no sabe de qué va el problema" y revela el alcance de su "sensibilidad social", puesto que el conflicto se ha generado por el anuncio de despidos y rebaja salarial a los trabajadores. También ha tildado de "disparate" y "contraproducente" la posibilidad de contratar a Tragsa en el marco de una huelga convocada por los representantes sindicales de los trabajadores de las concesionarias.

El portavoz municipal de UPyD, David Ortega, ha acusado a la alcaldesa de Madrid de no atajar "la raíz del problema" que ha ocasionado la huelga indefinida de limpieza viaria en la ciudad, según UPyD los contratos del servicio que entraron en vigor en agosto.

Ortega se ha mostrado en contra de la decisión de Botella de dar 48 horas a empresas y sindicatos para alcanzar un acuerdo y ha acusado al Ayuntamiento de Madrid de diseñar un contrato de limpieza 'low cost' -de bajo coste- para la ciudad y ha augurado que, mientras no se modifique ese contrato, todas las medidas "serán parches".