Antonio de la Rosa, vecino de Lozoyuela, inicia su aventura a través del Polo Sur

  • Remando, navegando y caminando tras las huellas de Ernest Shackleton
Antonio de la Rosa junto a su embarcación durante los preparativos para la travesía polar
Antonio de la Rosa junto a su embarcación durante los preparativos para la travesía polar |ANTONIO DE LA ROSA

El español Antonio de la Rosa, vecino de Lozoyuela y exbombero de la Comunidad de Madrid, inicia este jueves desde la ciudad austral chilena de Puerto Williams su más extrema y comprometida expedición. Pretende remar 1.000 km en solitario hasta la Antártida, seguir en vela otros 2.000 km a la isla Georgia del Sur, y cruzar a pie ese islote helado para alertar sobre el deterioro medioambiental.

"Espero tardar unas dos o tres semanas en llegar hasta Isla Elefante, en la Antártica, que es el tramo más difícil porque voy a remo; después tendré la ayuda de una pequeña vela para alcanzar Georgia del Sur", aseguró a EFE el deportista español horas antes de zarpar.

El objetivo de la expedición no es solo deportivo, remarcó Antonio de la Rosa, sino que quiere promover la defensa y la limpieza de los mares: "Soy un fiel defensor de los océanos, por eso se llama 'Ocean Defender' mi embarcación ", dijo el deportista.

Antonio de la Rosa, vecino de Lozoyuela, cruzará en solitario la Antártida remando y caminando
Antonio de la Rosa, vecino de Lozoyuela, cruzará en solitario la Antártida remando y caminando
Antonio de la Rosa, vecino de Lozoyuela, cruzará en solitario la Antártida remando y caminando

Antonio de la Rosa, vecino de Lozoyuela, cruzará en solitario la Antártida remando y caminando

"Espero no encontrar ningún plástico en las islas de la Antártica, pero, si lo encuentro, denunciaré que la huella del ser humano llega a cualquier parte del planeta", subraya De la Rosa, que narrará la expedición por sus redes sociales.

Encuentro con la isla de basura

La conciencia de Antonio de la Rosa sobre el problema de los plásticos en los océanos se ahondó cuando atravesó la isla de basura del Pacífico, en 2019, con la misma embarcación que ahora, y fue la primera persona en cruzar ese océano remando en solitario, cumpliendo el reto en 76 días.

El deportista detalló que lleva días esperando en Puerto Williams hasta tener las previsiones meteorológicas favorables para zarpar: en la madrugada de este viernes pasará un frente con rachas de viento de más de 120 kilómetros por hora y, cuando amaine, vendrán tres días de buen tiempo: será el momento de salir.

El madrileño Antonio de la Rosa cruzará por primera vez el Antártico a remo, a vela y en esquís en solitario
El madrileño Antonio de la Rosa cruzará por primera vez el Antártico a remo, a vela y en esquís en solitario
El madrileño Antonio de la Rosa cruzará por primera vez el Antártico a remo, a vela y en esquís en solitario

El madrileño Antonio de la Rosa cruzará por primera vez el Antártico a remo, a vela y en esquís en solitario

La embarcación, de apenas un metro y medio de ancho y siete de largo, es de un diseño único, construida en carbono y con una forma especial para remar.

No es la primera vez que Antonio de la Rosa intenta cumplir el reto al que se enfrenta ahora: quiso completarlo entre noviembre y diciembre de 2021, pero los problemas logísticos retrasaron que su embarcación llegase a Chile y, una vez lista, una infección por Covid-19 echó por tierra la expedición.

Antonio de la Rosa, un aventurero de récords
Antonio de la Rosa, un aventurero de récords
Antonio de la Rosa, un aventurero de récords

Antonio de la Rosa, un aventurero de récords

De la Rosa se ha convertido en un experto en travesías en solitario sobre embarcaciones frágiles. Atravesó el Atlántico remando y ganando la Travesía Rames-Guyanne, circunnavegó sobre una tabla de padle surf el Océano Ártico y ha recorrido de la misma manera todo el litoral español y portugués.

Este inquieto deportista extremo se mueve igual de bien sobre una bicicleta o tirando de un trineo sobre sus esquíes. Lo ha demostrado batiendo marcas o siendo pionero en pruebas míticas como la Lapland o la Iditarod. Ahora se enfrenta su reto más complejo y el más completo.