Rajoy dice que España no ha pactado con Bruselas el objetivo de déficit

  • La OCDE respalda la fijación del déficit en el 5,8 % para 2012
  • Barroso dice no tener "ninguna duda" de que España cumplirá su compromiso de estabilidad presupuestaria

El secretario general de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), José Ángel Gurría, ha respaldado hoy un déficit español para 2012 del 5,8 % del PIB, y ha considerado que con esta decisión el Gobierno "no renuncia a nada, ya que no cambia el punto de destino del 3 % en 2013".

En rueda de prensa junto al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el secretario general de la organización con sede en París ha dado su apoyo al "ambicioso programa de reformas" emprendidas en campos como el mercado de trabajo y el sector financiero, y lo ha considerado un "ejemplo" de determinación política.

Gurría ha recalcado que el paso del 4,4 % -cifra firmada por el anterior Ejecutivo- al 5,8 % que se ha estipulado ahora supone "transparentar las cifras" y "constatar que el desafío fiscal y presupuestario es mayor que cuando se preveía más crecimiento".

El 4,4 % de déficit fue pactado por el anterior Gobierno con la Comisión Europea con una previsión de crecimiento del 2,3 % para este año, aunque la realidad va a ser una recesión de entre un 1 y un 1,7 %, según las más recientes estimaciones.

Por eso, para Gurría se trata de "ajustar los ritmos en el camino", en línea con los argumentos defendidos por el propio Rajoy, quien ha subrayado que no tenía por qué pactar la nueva cifra en Bruselas durante el Consejo Europeo -celebrado los días 1 y 2 de marzo- ni con la Comisión.

Al respecto, Rajoy ha defendido que el Gobierno tiene un "plan preconcebido y estudiado", y que "se está cumpliendo", lo que implica que en abril hará llegar al Ejecutivo comunitario el plan de estabilidad y de reformas, que lo evaluará en mayo, y se volverán a estudiar los objetivos en la cumbre de junio.

En ese punto el jefe del Ejecutivo se ha mostrado "absolutamente convencido" de que con la Comisión Europea "haremos cosas sensatas y razonables, porque por fortuna la gente es sensata y razonable".

Además, ha añadido que si de algo no es "sospechoso" es de no estar comprometido con la consolidación fiscal, por lo que dice estar "muy tranquilo".

Su idea es que se están cumpliendo "escrupulosamente" los compromisos, tanto en la recomendación de reducir el déficit estructural una media de 1,5 puntos al año -este año se hará hasta 3,5 puntos- como en su objetivo de llegar al 3 % en 2013.

En cuanto a las autonomías, ha asegurado que el Gobierno "se responsabiliza de todo", ya que también son parte del Estado, pero ha recordado que deberán hacer un "esfuerzo importante" para llegar a un déficit del 1,5 % en 2012.

Preguntado por la posibilidad de flexibilizar aún más esta cifra, el jefe del Ejecutivo ha subrayado que ya se ha pasado del 1,3 al 1,5 %.

En esta línea ha recordado ayudas a las cuentas autonómicas como la aprobación de la norma para facilitar el pago de las administraciones públicas a los proveedores, aunque ha subrayado que se trata "no de poner dinero, sino de prestarlo".

APOYO DE LA COMISION EUROPEA

Por su parte, la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha asegurado este lunes que no tiene "ninguna duda" de que el Gobierno de Mariano Rajoy cumplirá sus compromisos de respetar el Pacto de Estabilidad, que obliga a reducir el déficit, y garantizar la estabilidad presupuestaria.

Barroso ha eludido pronunciarse sobre el nuevo objetivo de déficit anunciado por el Gobierno y ha pedido de nuevo "más información" sobre los motivos del desvío presupuestario de 2011 y sobre los presupuestos de 2012. "Necesitamos esos datos", ha resaltado.

"Estamos manteniendo consultas con el Gobierno español y por eso no voy a hacer comentarios concretos sobre la situación española", ha dicho presidente del Ejecutivo comunitario en rueda de prensa tras reunirse con el canciller austriaco, Werner Faymann.

"No tengo ninguna duda de que el Gobierno cumplirá sus compromisos de respetar el Pacto de Estabilidad y las reglas de gobierno en la eurozona y la UE", ha subrayado Barroso.

LA COMISION RECURRIRA A SANCIONES SI FUERA NECESARIO

Por su parte, La CE advirtió de que si fuera necesario recurrirá a las recomendaciones y medidas correctivas contempladas en la nueva gobernanza económica para que España cumpla los objetivos de déficit, y recordó que si el país escapó del riesgo de contagio fue porque el anterior Gobierno cumplió los objetivos.

"Una vez tengamos claridad sobre las cifras, la Comisión Europea hará su análisis y si fuera necesario hará sus recomendaciones bajo el artículo 126 del Tratado", señaló el portavoz europeo para Asuntos Económicos, Amadeu Altafaj.

Ese artículo regula el procedimiento por déficit excesivo, y puede conllevar que el Ejecutivo comunitario proponga al Consejo que imponga una multa del 0,2 % del PIB a un país de la eurozona si no toma acciones efectivas para corregir su déficit excesivo.

El objetivo de déficit "no fue acordado con España y la Comisión Europea, sino con todos sus socios europeos e instituciones europeas", recalcó Altafaj, quien reiteró que la posición del Ejecutivo comunitario es "la misma" con respecto a las obligaciones de España.

"Consideramos que el pleno cumplimiento del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) y de los objetivos de consolidación fiscal, especialmente en países que experimentan presiones por parte de los mercados, como España, ha sido y sigue siendo la piedra angular de la respuesta global de la UE a la crisis", indicó.

Recordó que el Consejo Europeo aprobó unas conclusiones en las que todos los líderes, incluido el español, Mariano Rajoy, reafirmaron que "todos los países miembros deben continuar respetando sus compromisos de acuerdo con el PEC".

Los Estados "que afrontan un escrutinio estrecho de los mercados deberían cumplir los objetivos presupuestarios y estar dispuestos a buscar medidas de consolidación adicionales si es necesario", añadió.

Desde el viernes no ha habido contacto entre la Comisión Europea y España, señalaron fuentes europeas.

"La solicitud para aclaraciones y explicaciones ya se había hecho por parte del vicepresidente Rehn el pasado jueves en el Eurogrupo", señaló el portavoz.

No obstante, recalcó que una coordinación más estrecha de la política económica "está en el centro" del reforzamiento de la gobernanza económica acordada por los líderes.

Para la Comisión, la actual crisis es una crisis de confianza, especialmente en los países expuestos a una fuerte presión de los mercados y España, sostuvo, experimentó en 2010 "claramente los beneficios de cumplir los objetivos de déficit", básicamente mediante una relajación de la presión del mercado, señaló.

Altafaj recordó que en 2010 hubo "muchas especulaciones" sobre la posibilidad de que "España pudiera estar en riesgo" de seguir a los países que necesitaron un rescate, "y eso no pasó porque las autoridades españolas respetaron los objetivos", apuntaló.

MONTORO CONFIA EN QUE LAS AUTONOMIAS NO PEDIRAN RELAJAR EL DEFICIT

Por su parte, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha expresado hoy en Málaga su confianza en que ninguna comunidad autónoma pedirá en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) convocado para mañana que se "relaje" el objetivo de déficit.

El ministro ha señalado que es preciso adecuar los presupuestos al objetivo de déficit público común, para lo cual ha dicho que hay que actuar con "moderación" y llevar a cabo "políticas de realismo", con respecto a la posible petición mañana en el CPFF de flexibilizar el déficit por parte de alguna región.

"Es muy exigente la senda de reducción del déficit", ha afirmado Montoro, que ha advertido de que "a nadie le conviene" pedir más flexibilidad en este aspecto, al ser preguntado sobre este asunto durante un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum celebrado hoy en Málaga.

Montoro ha recordado que el objetivo de estabilidad presupuestaria aprobado el pasado viernes establece que el déficit máximo en el que podrán incurrir las comunidades autónomas es del 1,5 por ciento, cuando el pasado ejercicio fue un 2,9 por ciento.

"Va a ser una semana muy importante", ha recalcado el titular de Hacienda, que ha anunciado que en el CPFF se debatirá sobre un doble planteamiento: por un lado, precisar el objetivo de déficit público para 2012, y por otro presentar un plan para proveedores.

Este plan, que consistirá en un crédito a proveedores por valor total de 35.000 millones de euros, con las condiciones de pago a diez años, una carencia de dos años y un interés del 5 por ciento, supondrá, según Montoro, un "ingreso formidable en la economía real" y una operación "muy beneficiosa" para las empresas españolas.

Precisamente, el Gobierno y las comunidades autónomas abordarán mañana en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera el nuevo objetivo de déficit para este año y el mecanismo extraordinario de financiación para el pago a proveedores, entre otras cuestiones.

Este encuentro, que estará presidido por el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, llega después de que el Consejo de Ministros diera su visto bueno a un objetivo de déficit para las autonomías del 1,5% del PIB en 2012 frente al 1,3% establecido para 2011.

A pesar del límite pactado, finalmente las comunidades registraron un desequilibrio negativo en las cuentas de un 2,94%, más del doble de lo previsto y mismo porcentaje que en el año 2010.

En el orden del día, al que ha tenido acceso Efe, se han incluido también otros temas como la información del Gobierno al CPFF sobre el límite máximo de gasto no financiero del presupuesto del Estado para 2012 y las estimaciones de las

necesidades de financiación de las comunidades del pasado año.

RUBALCABA DICE QUE NO COMPARTE LA CIFRA DEL 5,8% NI EL CALENDARIO

Por su parte, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha congratulado de que el Gobierno haya decidido flexibilizar la cifra de déficit para este año, aunque ha admitido que no comparte el 5,8 por ciento anunciado por el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, ni el calendario previsto. En su intervención en el Encuentro Financiero Internacional Bankia 2012, Rubalcaba ha señalado que le parecía bien que el Gobierno haya optado por no establecer el objetivo del déficit para este año en el 4,4 por ciento, aunque ha confesado que no comparte que haya decidido fijarlo en el 5,8 por ciento.

Aunque no lo ha mencionado expresamente, ha dado a entender que el PSOE hubiera preferido que la cifra fuera algo superior. No está de acuerdo tampoco con el calendario de estabilidad presupuestaria, según el cual España debe llegar al 3 por ciento de déficit en el 2013, y se ha mostrado convencido de que este aspecto también acabará revisándose este mismo año. También ha emplazado al Gobierno de Rajoy a presentar ya el proyecto de presupuestos generales del Estado de este año, al tiempo que ha vuelto a rechazar de plano la reforma laboral.

ROSELL CONSIDERA PRACTICAMENTE IMPOSIBLE CUMPLIR CON LOS OBJETIVOS DE DEFICIT

Asimismo, el presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha considerado este lunes que alcanzar los objetivos de déficit propuestos para 2012 será "prácticamente imposible", por lo que ha añadido que mejoras en la gestión y en la eficacia es lo "único" que se puede hacer en este "difícil año".

En concreto, Rosell se ha referido a la dificultad de alcanzar el objetivo anunciado el pasado viernes por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que anticipó que el déficit público de este año cerrará en el 5,8% del PIB y en el 3% en 2013.

Para Rosell, es "prácticamente imposible" bajar de un déficit muy alto a uno muy bajo en dos años. No obstante, ha aclarado que habrá que ver con "calma, pausa y tranquilidad" cómo se hace. "Tenemos de aquí a finales de marzo, que es cuando el Gobierno decidirá cuáles son los números definitivos, para que las comunidades autónomas, los ayuntamientos y la Seguridad Social vean lo que hacen", ha añadido.

Así, Rosell ha aclarado, tras su intervención en la presentación del 'Plan de Competitividad' para pymes, que la reducción del déficit necesaria para alcanzar los objetivos propuestos para el presente ejercicio es complicado "no solo aquí, sino en cualquier otro país", sobre todo teniendo en cuenta que no se prevé un crecimiento de los ingresos.